22 de diciembre de 2025
Científicos exploran el papel de rayos cósmicos en el origen de planetas como la Tierra

Una investigación sugiere que la exposición a partículas de alta energía pudo ser clave en esta dinámica
El nuevo modelo, denominado “baño de rayos cósmicos”, ofrece una alternativa más plausible y frecuente. En lugar de depender de una inyección directa y fortuita, el mecanismo se basa en la exposición continua del disco protosolar a los rayos cósmicos generados por una supernova situada a una distancia típica de un pársec, una separación habitual en los cúmulos estelares.
Desde el punto de vista físico, el “baño de rayos cósmicos” se presenta como un fenómeno universal. Dado que muchas estrellas similares al Sol se forman en cúmulos que albergan estrellas masivas, y que estas últimas suelen terminar su vida como supernovas, la exposición a rayos cósmicos sería un evento común.
Las implicaciones de este hallazgo divulgado en Diálogo Science X son relevantes para la búsqueda de mundos habitables. Si la formación de planetas similares a la Tierra dependiera de un encuentro extremadamente raro con una supernova, estos cuerpos serían excepcionales. Sin embargo, si basta con la inmersión en rayos cósmicos, las condiciones que favorecieron la aparición de la Tierra podrían darse en una gran proporción de estrellas similares al Sol. Según los autores, la formación de la Tierra podría no haber dependido de una coincidencia casi milagrosa.
El avance de este modelo muestra que, en ocasiones, comprender el origen de los planetas requiere observar procesos fundamentales que antes pasaban inadvertidos, más que añadir complejidad a las teorías existentes.

