Cierre de Whirlpool: cómo pasó de un ambicioso proyecto exportador a dejar de fabricar en el país en apenas tres años
La compañía anunció este miércoles el cierre de su planta de lavarropas de Pilar y despidió a 220 trabajadores. A partir de ahora, la firma se dedicará a importar
>La decisión de la multinacional
Whirlpool de
¿Qué pasó? ¿Cómo fue que la compañía pasó de inaugurar una planta último modelo para producir lavarropas de carga frontal de última generación y exportar a decidir cerrarla en apenas tres años (se inauguró en octubre de 2022)? En el sector recuerdan que no es la primera vez que la compañía de origen norteamericano toma esta decisión en la Argentina. Ya lo había hecho en 2003, cuando decidió cerrar su planta de heladeras que tenía en San Luis y dedicarse a importar. Ahora pasó lo mismo: el negocio no anduvo y la decisión, liderada desde la filial de Brasil de la cual depende, fue abandonar la producción local, despedir a sus 220 trabajadores, y dedicarse a la importación. Tras la noticia, conocida este miércoles, fuentes de la empresa dialogaron con Infobae y explicaron que fueron dos los motivos por los cuales se optó por este camino: por un lado, los altos costos argentinos que hacían inviable exportar a un precio competitivo -de hecho, estaban mandando muchos menos lavarropas al exterior que el plan original- y, por otro, la apertura total de la economía, que hizo que se desplomaran los precios de los electrodomésticos por la mayor competencia de productos importados. En el caso de los lavarropas, en octubre se vendieron 20% más baratos que el mismo mes del año pasado, según datos de la consultora NielsenIQ. “Se trataba de un modelo de negocio operativo y competitivo pensado para que sea eficiente y mucho más ágil de lo que realmente fue, algo que finalmente no pudo lograrse en un contexto de fuerte desaceleración del consumo y aumento significativo de las importaciones”. “La idea es empezar el camino de la transición y organizarnos hacia una operación más comercial que de fabricación”, explicaron las fuentes de Whirlpool a este medio. Con respecto al personal que se verá desafectado, la firma está negociando con el sindicato (Unión Obrera Metalúrgica) el paquete de salida, que incluirá la indemnización correspondiente más un plus. La medida incluyó tanto al personal de producción como a otros sectores vinculados con la operatoria de la planta (por ejemplo, áreas de ingeniería, calidad, entre otras). Están en plena negociación, por lo que todavía no hay información certera al respecto. Otra fuente del sector sumó información: “Con los precios como están, y ellos que tenían un costo alto, hoy no les conviene producir. Para exportar, sos cada vez menos competitivo, la Argentina tuvo mucha inflación en dólares en los últimos años, sumado a la carga impositiva que es muy alta”.