17 de octubre de 2025
Innovación, comodidad y salud: así son los centros de entrenamiento ingleses que cambian la vida de los futbolistas
Los complejos deportivos en el Reino Unido incorporan tecnología de punta, servicios personalizados y espacios integrados que impulsan el rendimiento físico y mental
En este contexto, la Selección de Inglaterra emprendió una renovación integral de St George’s Park, su centro de alto rendimiento en Staffordshire.
Andy Savery, gerente del complejo, afirmó a The Athletic: “El estándar al que los jugadores están acostumbrados ha subido”, y remarcó que el objetivo es diseñar un entorno tipo campus que promueva tanto el rendimiento como el bienestar.
Los nuevos espacios privilegian la integración: áreas de entrenamiento, recuperación y socialización se conectan mediante recorridos fluidos. Uno de los pilares del diseño actual consiste en eliminar barreras y potenciar la interacción espontánea. A su vez, en St George’s Park las paredes brindan estímulos anímicos, con frases motivadoras orientadas a los seleccionados ingleses.La tendencia comenzó a fines de los años 90, con la llegada de nuevas ciencias aplicadas al deporte y la influencia de modelos estadounidenses. Carrington, la base del Manchester United, marcó un antes y un después.Dentro de estos complejos, la tecnología define la rutina. Carrington dispone de rutinas con pantallas táctiles, cintas de correr subacuáticas y salas de altitud. El área médica integra equipos de diagnóstico de última generación, mientras que la recuperación física se complementa con piscinas, saunas y baños de vapor.
El impacto de estos entornos en la captación y retención de talento resulta palpable. Las jornadas de trabajo se han extendido, incluyen reuniones frecuentes y planes individualizados, lo que requiere áreas de descanso, restauración y habitaciones integradas dentro del complejo. Los responsables de reclutamiento cuidan cada detalle para adaptar a los nuevos fichajes, con guías digitales de bienvenida y un equipo de atención instalado estratégicamente para garantizar una transición eficaz.
Esta sofisticación, sin embargo, presenta dilemas. El confort extremo puede convertirse en un arma de doble filo: el caso de Leicester City, envuelto en retrocesos deportivos pese a contar con un complejo de lujo, expone el riesgo de perder exigencia en favor del bienestar.En definitiva, aunque la tecnología y el diseño no garantizan trofeos, en un fútbol cada vez más disputado, cualquier diferencial puede ser decisivo. La revolución de los centros de entrenamiento ha transformado a Inglaterra en un referente global, donde el confort y la innovación marcan la agenda y redefinen el futuro del deporte.