2 de diciembre de 2025
Taiwán comenzará antes de fin de año las pruebas de vuelo de los nuevos F-16V fabricados en Estados Unidos
La isla anunció un ambicioso presupuesto militar para el 2026 con la intención de fortalecer las capacidades asimétricas y garantizar la soberanía nacional, en respuesta a la creciente presión de China
El mes pasado, el ministro de Defensa, Wellington Koo, mencionó que la empresa estadounidense Lockheed Martin, responsable de la fabricación de los cazas, aumentó el ritmo de producción con dos turnos laborales cada día. “Hay 50 aviones en la línea de ensamblaje al mismo tiempo, y algunas estructuras ya han sido montadas completamente”, dijo Koo. Pese a este incremento, advirtió que será “un reto” cumplir con el plazo de entrega previsto para 2026.
Taiwán busca fortalecer sus capacidades defensivas para disuadir a China, que considera a la isla parte de su territorio y ha amenazado con emplear la fuerza para anexarla. El modelo F-16V, un caza polivalente de cuarta generación, representa una actualización significativa respecto a los antiguos F-16 A/B. La actualización de 141 cazas F-16 taiwaneses al estándar V finalizó a finales de 2023.Estados Unidos, aunque no mantiene relaciones diplomáticas formales con Taiwán, se mantiene como su principal socio y proveedor de armas. Washington ha autorizado ventas por miles de millones de dólares que incluyen cazas, misiles y buques de guerra, en línea con su compromiso de garantizar la capacidad de autodefensa taiwanesa.Lai ya había adelantado su intención de elevar el gasto en defensa hasta alcanzar el 3,32% del PIB en 2026, con una meta del 5% para 2030, atendiendo tanto a la presión militar de China como a las demandas de Washington para que Taipéi incremente su presupuesto de defensa.
En el mismo artículo de opinión, Lai agradeció el apoyo del presidente Donald Trump, remarcando el papel del liderazgo estadounidense en la seguridad internacional. Al mismo tiempo, reafirmó su voluntad de buscar oportunidades de diálogo con China, insistiendo en que la democracia y la libertad de Taiwán no son negociables y que la seguridad y soberanía del país se defenderán con acciones firmes.


