17 de noviembre de 2025
El fotógrafo de Senna reveló los secretos de cómo se convirtió en estrella de la F1 y elogió a Colapinto: “Su parecido con Ayrton es increíble”

Infobae habló con Keith Sutton, quien también fue el representante del brasileño en sus primeros años de actividad. Su amistad con Quique Mansilla y sus buenos recuerdos de Argentina
Sutton rememora que su primer encuentro con Senna ocurrió en Thruxton, donde el piloto competía en el campeonato de Fórmula Ford 1600, apenas en su segunda carrera con monoplazas tras una exitosa etapa en el karting. El fotógrafo, que trabajaba para la revista brasileña Auto Esporte, siguió de cerca al joven piloto, documentando sus progresos. Una semana después, en Brands Hatch, Senna se interesó por el destino de las fotografías y le propuso a Sutton que se convirtiera en su fotógrafo personal y enviara imágenes a Brasil.
“Trabajé con él durante tres años, haciendo sus fotografías y sus relaciones públicas. Fue una época maravillosa. Pero yo tenía 21 años, él tenía 20 cuando nos conocimos. Cuando tuvimos esos momentos increíbles”, destaca.
El regreso de Senna a las pistas se produjo en febrero de 1982, cuando llamó a Sutton para comunicarle que volvería a competir en el campeonato de Fórmula Ford 2000, tras resolver sus dificultades personales y separarse de su esposa. Esa historia fue reproducida en la biotopic del astro brasileño en Netflix, aunque cuentan cómo el fotógrafo debió convencer al piloto para que dejara de trabajar en la fábrica de su padre, Milton, y se dedicara de lleno a su pasión, el automovilismo.
Sobre lo que más le sorprendió de Senna, revela que “su dedicación y su carisma. Su concentración con lo que quería hacer. Él tenía un sueño desde temprano, de llegar a la Fórmula 1 y ser campeón del mundo. Y nunca se rindió”.
En 1983, Ayrton fue campeón de la Fórmula 3 Británica y gracias al trabajo de Sutton, Bernie Ecclestone, por entonces dueño de Brabham, lo llamó para que el brasileño probara uno de sus autos. También ensayó con McLaren y Williams. Al año siguiente Senna firmó con Toleman y Sutton también tiene lazos con Argentina ya que en sus primeros años junto a Senna se hizo amigo de Enrique Quique Mansilla, un rival que marcó al brasileño, al punto de dedicarle un capítulo entero en la mencionada serie. “Sigo en contacto con Quique. Es un buen amigo. Hablamos recientemente, especialmente después de la serie de Netflix donde aparecimos los dos”, afirma. “Sigue siendo un tipo muy divertido. Nos reíamos mucho”, apunta. Al ex piloto de Lanús se le complicó seguir corriendo en Inglaterra por la Guerra de Malvinas y tras un breve intento de continuidad internacional regresó al país. Ambos se reencontraron en la vuelta de la F1 a nuestro país en 1995. “Me encanta Argentina. Tiene lugares increíbles. Espero que la F1 vuelva algún día”, subraya Keith.
También se refirió a otro argentino y que hoy es uno de los 20 pilotos que corre en la F1, Franco Colapinto, al que elogió: >Keith Sutton es historia viviente de la F1. Tiene 700 Grandes Premios en su haber y sus fotos se convirtieron en imágenes icónicas de la categoría. En especial las de su recordado amigo Ayrton Senna, con quien supo crecer dentro del automovilismo y lo acompañó cuando alcanzó la cúspide.
