30 de octubre de 2025
El video de la mordida en el clásico rosarino de futsal entre Newell’s y Central que terminó en escándalo
El encuentro terminó 1-1 y luego hubo amenazas, disturbios y autos destrozados
A pesar de la intensidad en el campo, no se registraron incidentes entre los planteles ni los cuerpos técnicos durante ni inmediatamente después del partido. Sin embargo, la situación cambió drásticamente en el exterior del estadio. El informe del Tribunal de Disciplina señala que “se constata la existencia de daños a la propiedad privada del plantel visitante de Rosario Central, específicamente sobre vehículos particulares que se encontraban en las inmediaciones”. Además, el mismo documento advierte sobre “fallas en las funciones del personal de seguridad contratado y del adicional policial dispuesto por el equipo local, cuya inacción o falta de control permitió los daños señalados en el punto anterior”.
El informe subraya la gravedad de lo ocurrido al indicar que “como hecho de mayor gravedad se verificó una falla sustancial en la seguridad interna de la institución local (Newell’s), que permitió la invasión de simpatizantes ajenos al deporte al área de circulación de los equipos. Estas personas profirieron agravios, amenazas y ocasionaron daños materiales de consideración sobre los vehículos del plantel visitante que se encontraban retirándose del estacionamiento del estadio cubierto”.Desde la delegación de Central se aportaron detalles sobre el momento en que se desencadenaron los hechos violentos. Tras finalizar el partido, el plantel visitante optó por reunirse en un rincón del estadio para cambiarse y evitar salir con la indumentaria del club, con el objetivo de no provocar situaciones de riesgo. Según relataron, “cuando salimos al estacionamiento de Newell’s para retirarnos en los vehículos, observamos que una de las motocicletas y 4 de los 5 autos presentaban daños: estaban rayados, abollados producto de golpes, espejos retrovisores arrancados, y demás daños a verificar”.El relato de los hechos incluye una agresión directa con una piedra, que fue arrojada contra uno de los autos y rompió el vidrio trasero, provocando lesiones en el cuello de un jugador que se encontraba dentro del vehículo. Además, un integrante de la delegación recibió un golpe en la cabeza con un palo, aunque el casco reglamentario que llevaba puesto evitó consecuencias mayores. Las agresiones y persecuciones se extendieron por unos 300 metros en el parque Independencia, según informaron desde Central.


