30 de octubre de 2025
El partido centrista D66 se impone en las elecciones de Países Bajos y frena el avance de la extrema derecha
El liderazgo de Rob Jetten ganó apoyo al prometer soluciones a la crisis de vivienda, mejoras en educación y un enfoque moderado sobre inmigración. El resultado obliga a complejas negociaciones para formar una coalición de gobierno
La jornada electoral estuvo marcada por un clima de celebración en la sede central de D66, donde simpatizantes ondearon banderas neerlandesas y corearon diversas consignas.
“Pasemos la página de Wilders y trabajemos por un futuro espléndido para nuestro hermoso país”, añadió el político, que basó su campaña en la promesa de resolver la crisis habitacional, invertir en educación y abordar con responsabilidad los retos migratorios.
Jetten, de 38 años, experimentó un fuerte impulso en la recta final de la campaña, ganando apoyo especialmente entre jóvenes y votantes urbanos que buscaban una alternativa a las recetas drásticas y nacionalistas de la extrema derecha. Las encuestas reflejaron además la resistencia de buena parte del electorado a endurecer la postura sobre los migrantes y a recortar las alianzas internacionales tradicionales de Países Bajos.Por su parte, Geert Wilders, uno de los referentes populistas más veteranos de Europa, reconoció su decepción ante la pérdida de escaños y la imposibilidad de retener el primer puesto tras su triunfo sorpresivo en 2023.El dirigente del Partido de la Libertad había propuesto cancelar todas las solicitudes de asilo (en violación de los tratados de la Unión Europea), restringir la llegada de refugiados ucranianos y eliminar la ayuda al desarrollo, entre otras propuestas polémicas.
La participación de Wilders en el gobierno tras las anteriores elecciones también resultó breve y turbulenta: aunque logró formar un bloque conservador mayoritario, sus aliados se negaron a respaldar su candidatura como jefe de gobierno y el gabinete colapsó en junio por disputas sobre el enfoque antiinmigración.Entre los escenarios más probables figura un acuerdo entre D66, el partido democristiano, el centroderecha VVD y la alianza progresista Greens-Labour, aunque las negociaciones podrían extenderse durante meses dada la fragmentación política y las profundas diferencias ideológicas entre los potenciales socios.
Mientras tanto, los compromisos internacionales de Países Bajos, como el respaldo a la OTAN, a la Unión Europea y al aumento del presupuesto militar, no parecen en discusión. Todos los partidos tradicionales, incluido el D66, han reiterado su apoyo a la defensa colectiva y a Ucrania frente a la agresión rusa.El golpe sufrido por los partidos progresistas también provocó cambios internos: el ex comisario europeo y líder de los Greens-Labour, Frans Timmermans, renunció tras conocerse que su bancada caería a 20 escaños, frente a los 25 que obtuvo en 2023.
El escrutinio final oficial y los negociadores de coalición tomarán las próximas semanas para definir la arquitectura del futuro gobierno.(Con información de Reuters y AFP)


