20 de octubre de 2025
La polémica del primer gol de Marruecos ante Argentina en la final del Mundial Sub 20: el acierto del árbitro y la doble falla de Barbi

El elenco nacional albiceleste padeció la primera etapa desde el comienzo con un pedido de revisión por parte del conjunto africano
En la ejecución de esa falta, Zabiri abrió el marcador con un zurdazo preciso al palo del arquero, estableciendo el 1-0 a los once minutos. En esta acción, el guardameta argentino cometió un segundo error, puesto que era la dirección que él tenía que cubrir.
A los 23 minutos, Carrizo estuvo cerca de igualar el marcador con un tiro libre que pasó a escasa distancia del poste derecho. Sin embargo, la respuesta marroquí no tardó en llegar. Antes de la media hora de juego, Othmane Maamma desbordó por la derecha y envió un centro que encontró a Zabiri en posición de remate. El delantero definió con una volea a quemarropa, superando nuevamente a Barbi y ampliando la ventaja a 2-0.
El cuerpo técnico argentino buscó modificar el desarrollo del juego con el ingreso de Mateo Silvetti en lugar de Valentino Acuña a los treinta y tres minutos. Poco después, Alejo Sarco intentó sorprender con un remate lejano que se fue desviado, en un esfuerzo por revertir la tendencia adversa. En los minutos finales, Silvetti dispuso de una oportunidad de cabeza, pero el arquero Gomis controló sin dificultades.A diferencia de otros árbitros europeos de perfil mediático, Mariani se distingue por su consistencia y su lectura táctica. Su estilo se caracteriza por la sobriedad y la racionalidad: prioriza el control del partido mediante la autoridad y la ubicación, más que por la aplicación estricta de sanciones. En promedio, muestra cuatro tarjetas amarillas por partido y una roja cada dos encuentros, lo que refleja una tendencia al equilibrio y cierta prudencia, especialmente en contextos de alta fricción. Desde el punto de vista físico, recorre aproximadamente 10 kilómetros por partido, con un tiempo efectivo de juego cercano a los 55 minutos y un promedio de 25 faltas sancionadas por encuentro.
Su fortaleza radica en la interpretación de las faltas tácticas y en la gestión de las ventajas en zonas sensibles del campo, aunque en partidos de máxima tensión se le han observado momentos de duda ante decisiones disciplinarias límite. A pesar de ello, su orden técnico y serenidad lo posicionan como uno de los árbitros italianos con mayor proyección hacia el próximo Mundial absoluto.