15 de septiembre de 2025
Una investigación por robo derivó en el inesperado hallazgo de un invernadero repleto de marihuana

Un operativo policial en Chañar Ladeado terminó con la detención de tres hombres, el descubrimiento del búnker con las plantaciones y el secuestro de armas, dinero y equipos electrónicos
El giro inesperado llegó poco después. Mientras la Policía inspeccionaba el área en busca de un posible cuarto involucrado, detectó un galpón rural cercano que ocultaba un invernadero artesanal de marihuana.
Por la magnitud del hallazgo, tomó intervención el fiscal federal Juan Manuel Frausin, con sede en Rosario, mientras que la causa por el intento de robo quedó en manos del fiscal Santiago Tosco, de la unidad del Ministerio Público de la Acusación de Cañada de Gómez. Ambos coordinan la investigación en conjunto, ya que el procedimiento quedó atravesado por delitos de competencia provincial y federal.
Según detalló el reporte oficial, todos los elementos incautados fueron incorporados a la causa. Los tres detenidos permanecen incomunicados por orden de la Fiscalía de Firmat, bajo la carátula de hurto calificado en concurso real. Mientras tanto, continúan las tareas de investigación para establecer si hubo participación de más personas y cuál era el destino de la producción de cannabis encontrada.Hace unas semanas, la Policía Federal Argentina (PFA) El operativo fue llevado adelante por la División Unidad Operativa de Investigaciones Especiales (DUOIE) Rosario, dependiente de la Superintendencia de Agencias Federales.La causa está bajo la órbita de la Fiscalía de Microtráfico, a cargo del fiscal Diego Maximiliano Giró, quien ordenó las tareas de inteligencia tras detectar un punto de venta en un pasillo interno de la calle Piamonte.El caso se originó en junio, cuando brigadas federales habían detenido a dos hombres con droga y armas, lo que derivó en la apertura de una investigación más amplia.
Luego de semanas de seguimientos y tareas encubiertas, los efectivos secuestraron importante cantidad de clorhidrato de cocaína y picadura de marihuana, además de dinero en efectivo, teléfonos celulares, elementos de corte y estiramiento y anotaciones contables vinculadas a la comercialización.