7 de agosto de 2025
“Ya no siento que mi vida se acaba si pierdo un partido”: la transformación de Naomi Osaka tras su retiro y maternidad

Entre desafíos, entrenamientos y consejos de figuras legendarias, la deportista relató en el podcast de Jay Shetty un camino donde la familia y el bienestar redefinen el verdadero significado del éxito en el tenis de elite
El núcleo familiar ha sido fundamental en la vida de Osaka. Nacida en Japón y criada en Estados Unidos desde los tres años, vivió bajo la disciplina japonesa y la generosidad haitiana. “En Haití, la gente da aunque no tenga nada que dar”, afirmó, intentando llevar esa hospitalidad a su día a día. La disciplina se refleja incluso en sus hábitos alimenticios: evita el arroz, habitual en ambas culturas, para mantenerse en forma.
El rol de la familia fue clave desde sus inicios. Su padre, inspirado en Richard Williams, creó un “plan maestro” de entrenamiento para Naomi y su hermana, con jornadas intensivas diarias. “Pensaba que sería raro no lograrlo, porque era mi vida”, recordó. La mudanza a Florida reforzó aún más el lazo familiar ante la ausencia de otros parientes.Las figuras clave en el deporte marcaron la trayectoria de Osaka. Serena Williams fue referente y rival: “Es la mejor tenista de todos los tiempos”, sostuvo. Recibir su mensaje tras ganar su primer Grand Slam resultó emocionante y consolidó un respeto mutuo. Kobe Bryant fue otro mentor fundamental: “Me dijo que debía ser como un león y que las opiniones de los demás son como moscas alrededor de los ojos”, compartió Osaka sobre el consejo que más la impactó.El crecimiento deportivo trajo desafíos. Describió cómo las ruedas de prensa se volvieron impersonales: “Sentía que no me trataban como a un ser humano”. Durante mucho tiempo, se comparó con rivales y consigo misma, hasta que decidió mirar el futuro y aprender de cada experiencia.La salud mental sigue en el centro de su mensaje. Osaka fue pionera al destacar el valor del equilibrio emocional en el alto rendimiento: “Nunca estás solo. Siempre hay personas que se preocupan más de lo que crees”. Considera esencial pedir ayuda y señala la meditación, la escritura y el contacto familiar como herramientas para el bienestar.