18 de julio de 2025
Una arrepentida contó cómo cambiaban notas por sexo y dinero en el caso que sacude a la Universidad de Tucumán

Una ex alumna relató cómo operaba el circuito de cobros y ofrecimientos en la Escuela de Enfermería, con mensajes de audio y transferencias como prueba en la causa judicial
“Me señalaba algunos compañeros a los cuales yo debía decirle cómo debían manejarse para que el profesor pueda ponerle las notas”, dijo. Y detalló las sumas de dinero que circulaban: “Sobre cuánto se cobraba, llegué a recibir entre 60 a 70 mil y escuché de su boca –tal como digo en los audios– hasta 100.000 por parciales”.
A lo largo de la entrevista, Villagra explicó que el profesor la convencía de seguir actuando con la promesa de ayudarla a conseguir trabajo. “Él me decía que iba a ayudarme con mi trabajo, hasta que vi que se fue de las manos. Era mucho lo que hacía”, expresó.
También contó que algunos alumnos se quejaban por la insistencia de Palavecino para cobrarles más de una vez por la misma materia, aun cuando ya le habían pagado. “Muchos alumnos me contaban que los llamaba pidiéndole más dinero. Me decían ‘me llama y me sigue pidiendo plata cuando ya le pagué’. Lamentablemente, pagaron por su título, hoy están ejerciendo y la sociedad en sí está en riesgo porque no saben hacer su trabajo”.En uno de los mensajes de voz, el profesor le dice a Villagra: “50 mil me ha ofrecido. Yo no te voy a dar una promoción por 50 mil”. En otro audio relata: “Se me ha puesto el vago con las patas abiertas mostrándome el p… sentado ahí”.
En sus mensajes también amagó con contar más sobre docentes que participaban del mismo circuito, cuando señaló: “Estoy cansado de hacer favores a medio mundo. En dos semanas yo meto a todos los docentes que hacen cobrar para que los alumnos aprueben… Son mis compañeros, pero si quiero abro la boca y va a ser una bola grande: van a caer profesores, alumnos, todo”.La investigación judicial arrancó después de una denuncia anónima que alertó sobre prácticas irregulares en la filial Aguilares de la Escuela de Enfermería, dependiente de la Facultad de Medicina de la UNT.En paralelo, la denuncia anónima llegó a la Fiscalía Federal N°2 de Tucumán, encabezada por Agustín Chits. El escrito denunciaba directamente a la coordinadora Adriana Barrionuevo y detallaba maniobras con dinero, regalos y favores sexuales para modificar notas. También se aportó un pendrive con comprobantes de transferencias, capturas de WhatsApp y audios sobre la operatoria interna. Los montos variaban entre 30.000 y 100.000 pesos para modificar parciales o exámenes finales.