24 de junio de 2025
Daniel Noboa inició gira internacional con agenda marcada por el pragmatismo económico

La gira busca posicionar al Ecuador en escenarios clave de cooperación económica y política
Posteriormente, la gira continuará en España, del 28 al 30 de junio, con una reunión de alto nivel con el rey Felipe VI en Sevilla. A este evento asistirán figuras como António Guterres, secretario general de las Naciones Unidas; Philémon Yang, presidente de la Asamblea General; Bob Rae, presidente del Consejo Económico y Social; Ajay Banga, presidente del Banco Mundial; Kristalina Georgieva, directora gerente del FMI; y Ngozi Okonjo-Iweala, directora general de la OMC.
Finalmente, el recorrido concluirá en Italia, entre el 30 de junio y el 3 de julio. La agenda incluye reuniones con el presidente Sergio Mattarella, la primera ministra Giorgia Meloni, el fiscal nacional antimafia Giovanni Melillo, así como con otras autoridades de Estado. También se contempla una reunión de la canciller ecuatoriana con el ministro de Asuntos Exteriores, Antonio Tajani, y un encuentro con el presidente del Senado, Ignazio La Russa, ambos señalados como “por confirmar”.Para el internacionalista Pablo Begnini, director de la carrera de Relaciones Internacionales de la Universidad Hemisferios, la visita a China responde a una lógica de diversificación estratégica de los socios internacionales del Ecuador. Destaca que el país busca el respaldo chino en foros multilaterales, especialmente para facilitar financiamiento.El académico señala además que, aunque se perciba una contradicción en la política exterior ecuatoriana al estrechar lazos con potencias enfrentadas como Estados Unidos y China, se trata en realidad de una estrategia de focalización temática. “Seguridad con EEUU y la UE, financiamiento con China”, resumió.
La politóloga Sofía Cordero coincide en que la relación con China puede ser beneficiosa en términos de comercio, inversión y tecnología, pero advierte que “todo dependerá de los términos de la negociación y de la ética del Gobierno ecuatoriano”. Recordó los casos de corrupción y contratos desfavorables que marcaron la relación con China durante el correísmo, especialmente en los sectores minero y petrolero.Ambos expertos coinciden en que la actual política exterior del Gobierno ecuatoriano se caracteriza por su pragmatismo. “No hay una línea ideológica clara. No se trata de un gobierno privatizador, y aunque se ha acercado a Israel y a EEUU, también busca vínculos con China. Esa lógica multipolar puede ser positiva”, indicó Cordero.
Begnini, por su parte, subrayó que Ecuador no debe limitarse a las giras simbólicas, sino traducirlas en acuerdos concretos y ejecutables. “Las visitas deben tener resultados tangibles. Y la ciudadanía debe percibir que hay beneficios reales. La comunicación de estos logros será clave”, remarcó.