19 de junio de 2025
Revelaron nuevos detalles sobre cómo fueron las últimas horas con vida de Liam Payne: “Estaba como convulsionando”

Roger Nores, amigo del artista, y huéspedes del hotel CasaSur de Palermo, Ciudad de Buenos Aires, recordaron cómo vieron al cantante antes de su trágica muerte
A las 14:00, pidió otros siete gramos de cocaína a un empleado del hotel, quien se los entregó alrededor de las 15:30. Nores llegó al establecimiento a las 15:45 para pagarle a las escorts.
Para las 16:00, un trabajador del hotel describió a Payne como “visiblemente bajo los efectos de alguna sustancia”.A las 16:26, el cantante bajó al vestíbulo con una notebook y una botella de whisky, rompió la computadora y se desmayó. Los empleados lo ayudaron a regresar a su habitación, pero a las 16:50 volvió al vestíbulo, casi inconsciente, y se desmayó nuevamente. Tres empleados lo trasladaron de regreso a su habitación, donde recuperó brevemente la conciencia.
El gerente del hotel llamó al 911 a las 17:01, pero a las 17:07, Liam Payne cayó y murió.“Definitivamente, parecía que él estaba bajo las influencias de alguna sustancia, de acuerdo a nuestros invitados”, recordó durante su testimonio en el documental. Añadió que, en un momento, Payne se agitó repentinamente y arrojó su computadora portátil al suelo, lo que dejó a todos en estado de shock.
Watson también presenció cómo el personal del hotel intentó evitar que el cantante regresara al vestíbulo y cómo, minutos antes de la caída, el cantante se desmayó y fue trasladado por empleados al ascensor.Watson confesó que la imagen quedó grabada en su memoria y que aún intenta procesar lo ocurrido.
El masajista del hotel, Daniel Salinas, también aportó su testimonio. Describió que, junto a otros empleados, intentaron llevar a Payne a su habitación porque parecía estar sufriendo un episodio psicótico. “Estaba como convulsionando. En un momento en el que se levantó, intentaba ir a otro sitio, pero le estábamos guiando”, aseguró.La investigación de los fiscales apunta a Braian Nahuel Paiz, empleado del hotel, como la persona que facilitó la droga a Liam Payne.
Según los documentos oficiales, Paiz le entregó tres gramos de cocaína al cantante, y existen fotografías que respaldan esta afirmación. Su testimonio también forma parte del documental. De esta manera, el camarero reconoció haber consumido drogas con Payne, aunque negó haberle vendido la sustancia: “Sí, consumí drogas con Liam. Había cocaína. No había mucho, pero tomamos un poco con un whisky. La segunda noche ya estaba la caja de jabón, el papel de aluminio, droga esparcida por todas partes”. El joven insistió en que no aceptó dinero ni regalos, salvo un dibujo hecho por Payne.