24 de abril de 2025
“Francisco dio a África el compromiso con la dignidad y la justicia”: el homenaje al Papa de un candidato a sucederlo

Considerado uno de los posibles sucesores, el cardenal Fridolin Ambongo subrayó el compromiso del Pontífice con la dignidad humana y la justicia social, recordando su histórica visita a la República Democrática del Congo en 2023
El papa Francisco murió el lunes 21 de abril de 2025, apenas un día después de haber impartido la tradicional bendición Urbi et Orbi en la Plaza de San Pedro, lo que había generado esperanzas de una posible recuperación. Su funeral se celebrará el 26 de abril a las 10:00 horas, en el atrio de la Basílica de San Pedro, durante la apertura de los ritos fúnebres conocidos como Novendiali, conforme al Ordo Exsequiarum Romani Pontificis.
Ambongo enfatizó que el legado de Francisco en África se fundamenta en la defensa de la dignidad humana y en la denuncia de los sistemas de explotación que persisten en el continente. Durante su visita apostólica a la República Democrática del Congo en 2023, el Papa condenó enérgicamente el “colonialismo económico”, al que calificó como una nueva forma de esclavitud. En aquella ocasión, Francisco pidió a la comunidad internacional: “¡Manos fuera de la RDC, manos fuera de África, que no es una mina para ser explotada ni una tierra para ser saqueada!”.
Según Ambongo, estas palabras no solo marcaron profundamente a los congoleños, sino que siguen resonando en todo el continente: “Fue un momento de comunión entre congoleños, entre el pueblo y su Dios. Esto quedará en la historia”.Ambongo fue uno de los miembros del Consejo de Cardenales (C9), órgano que asesoró al Papa en el proceso de reforma de la Curia Romana. Este rol lo convirtió en uno de los principales interlocutores del Pontífice en temas estructurales de la Iglesia. Asimismo, respaldó con firmeza el proceso sinodal impulsado por Francisco, el cual proyecta una Asamblea Eclesial en el año 2028.“El Papa quedará en la historia como el Papa de la reforma”, expresó Ambongo. “Estoy convencido de que la reforma continuará porque el Papa la llevó hasta el punto de no retorno”. En sus palabras, el Sínodo no quedó inconcluso, sino que se consolidó como un legado que ahora corresponde a la Iglesia seguir implementando.Como presidente del SECAM, consideró ese mensaje como un mandato que deben asumir los líderes eclesiales africanos para continuar promoviendo la dignidad, la reconciliación y la esperanza en contextos de violencia estructural. Añadió que la Iglesia debe seguir siendo “sal de la tierra y luz del mundo”, iluminando las realidades que enfrentan sus fieles.
En medio del duelo por la muerte del Pontífice, Ambongo exhortó a los cristianos del mundo a permanecer en oración: “Pido simplemente al pueblo de Dios que lo siga apoyando con la oración y mantenga una actitud de recogimiento”.