24 de abril de 2025
Dos cardenales reflexionaron sobre el legado del papa Francisco: “Su bondad y su cercanía a Jesús es algo enorme que nos ha dejado”

“Lágrimas y miradas perdidas se alternaron en los rostros de los fieles y los misioneros”, recordó Giorgio Marengo sobre el impacto que causó la muerte del pontífice en la pequeña comunidad católica de Ulán Bator
Por su parte, el cardenal Jean-Claude Hollerich, arzobispo de Luxemburgo y relator general del Sínodo, ofreció una reflexión profunda sobre el legado de Francisco en relación con el proceso sinodal, que ha sido uno de los pilares de su pontificado. Hollerich destacó que, para él, el papa Francisco fue una figura esencial en la promoción de la sinodalidad, un concepto que implica la participación activa y el diálogo dentro de la Iglesia, con la idea de que todos los miembros del pueblo de Dios deben caminar juntos, en comunidad.
“El Papa siempre ha apoyado los pasos que hemos dado en el Sínodo”, recordó Hollerich, subrayando cómo Francisco no solo respaldó el proceso sinodal, sino que lo consideró una herramienta vital para una Iglesia más abierta y participativa. “Cuando el cardenal Mario Grech y yo acudíamos a él cada mes para prepararlo, siempre nos animaba a seguir adelante”, dijo, reflejando la cercanía y el apoyo constante del Papa a las iniciativas sinodales.Con la muerte del papa Francisco, la Iglesia Católica se enfrenta a la difícil tarea de elegir a un nuevo líder. En este contexto, el cardenal Carlos Castillo, arzobispo de Lima, habló sobre el cónclave que se llevará a cabo entre el 5 y el 10 de mayo, en el que cardenales de todo el mundo elegirán al próximo Pontífice. Castillo subrayó que el proceso de elección es una mezcla de diálogo humano y divino, en el que la orientación del Espíritu Santo guía las deliberaciones para encontrar al sucesor adecuado.
A pesar de que algunos sugieren que el próximo Papa podría ser una figura más rupturista, Castillo destacó que, históricamente, la Iglesia busca mantener la continuidad con el pontificado anterior. “Lo que se ha avanzado es irreversible”, afirmó, refiriéndose a los progresos realizados durante el papado de Francisco, especialmente en términos de sinodalidad y apertura. Según Castillo, la Iglesia continuará con el camino marcado por Francisco, y el nuevo Papa será elegido para seguir con ese legado, no para dar un giro radical.