11 de abril de 2025
De la barra de un bar porteño al altar en Oklahoma: la foto casual con un militar de EE.UU. que se convirtió en un amor inesperado
Ayelén Goggi trabajaba como camarera cuando conoció a Rob, integrante de la Fuerza Aérea estadounidense que había viajado a Buenos Aires en 2019 . Para la mujer: “No fue un flechazo, la relación se consolidó meses después por chat”
Pese a la brevedad de sus intercambios, Rob se animó a pedirle una foto grupal antes de regresar a su país. Esa imagen sería el inicio de una conversación sostenida por Facebook Messenger, que rápidamente se convirtió en una rutina diaria y luego en amor.
Ayelén, porteña de 36 años, tenía entonces una trayectoria profesional construida entre tres carreras —organización de eventos, hotelería y tripulante de cabina de pasajeros—, y trabajaba de manera estable.Rob, por su parte, contaba con más de dos décadas de servicio en la Fuerza Aérea, y se encontraba destinado temporalmente en Buenos Aires por un programa bilateral de capacitación. “Él no es piloto. Es navegador. Es quien va detrás del piloto, guiando la ruta y coordinando altitudes”, explicó ella.Rob decidió regresar a Argentina en octubre de 2019. A diferencia de su primera visita, esta vez no se hospedó en un hotel: se quedó en el departamento de Ayelén, en el barrio de Almagro. Durante ese mes convivieron por primera vez. Ella trabajaba en horario nocturno, por lo que compartían las mañanas y los mediodías. “Él aprovechaba para recorrer la ciudad por su cuenta. Es una persona que ha viajado mucho. Está acostumbrado a manejarse solo”, contó.
En esa estadía, Rob también conoció a la familia de Ayelén. Pasó tiempo con sus padres y sus hermanos, compartió comidas y fortaleció su vínculo con ellos. “Mis papás lo conocieron en esa visita. Yo les decía en broma ‘este es mi novio yanqui’. Les cayó bien desde el principio”, recordó.Durante varios meses, la pareja no pudo verse. Ella continuó trabajando parcialmente, ya que el hotel había cerrado, pero mantenía parte del salario. En ese contexto, American Airlines anunció en septiembre de 2020 que reanudaba los vuelos a Argentina, y Ayelén no lo dudó: compró su pasaje y volvió a Estados Unidos. “Fue directo a Miami, donde Rob me estaba esperando. De ahí volamos juntos a Arkansas”, dijo.
Ese segundo viaje, inicialmente previsto por tres meses como indicaba su visa de turismo, se transformó en permanente. “Rob me propuso casamiento. Yo le decía que no podía quedarme, que tenía que volver. Pero al final nos casamos en enero de 2021”, relató Ayelén. La ceremonia fue íntima, sin fiesta ni invitados, y sirvió como punto de partida para iniciar los trámites de residencia.Con la residencia aprobada, consiguió trabajo como camarera en un restaurante argentino llamado Buenos Aires Café, en Little Rock, Arkansas. Allí redescubrió su vocación por la actividad física. “Yo daba clases de zumba en Buenos Aires, pero nunca lo había pensado como algo a largo plazo. Acá decidí renovar mi licencia y empecé a dar clases en gimnasios”, explicó. Más tarde cursó una certificación online en fitness, lo que le permitió ampliar su propuesta laboral.
Actualmente, Ayelén trabaja como instructora de fitness en cuatro gimnasios distintos en Oklahoma, estado al que se mudaron en diciembre de 2024 por un nuevo destino de Rob. La casa donde viven la alquilan con una asignación que recibe él por su rango y años de servicio. Comparten el hogar con el hijo de Rob, de 11 años, que los visita durante vacaciones escolares y feriados extensos.En diciembre de 2022, sus padres viajaron a Estados Unidos para visitarla y conocer su vida en Arkansas. “Pasaron la Navidad y el Año Nuevo con nosotros. Querían ver cómo era la vida acá. Yo les advertí que no era como las fiestas en Argentina, pero lo disfrutaron”, explicó.
En 2025, Ayelén viajó sola a Buenos Aires para celebrar el cumpleaños de su padre y de una sobrina. Rob no pudo acompañarla por motivos laborales. En cuanto al futuro, la pareja no descarta agrandar la familia, aunque Ayelén admite que aún no lo tiene claro. “Un día quiero y al otro no. Es una decisión muy personal. Rob ya es papá, así que no me presiona. Pero es algo que hablamos”, reveló.Sobre un eventual regreso definitivo a Argentina, considera que no es una opción por el momento. “Hoy, abril de 2025, no me veo volviendo a vivir allá. Pero uno nunca sabe. Las cosas pueden cambiar. Por ahora estamos bien acá”, concluyó.