13 de marzo de 2025
YPF sumó cuatro nuevas concesiones para la producción de petróleo en Vaca Muerta

La petrolera estatal expande su presencia en la formación no convencional con nuevos bloques que impulsarán la producción y la capacidad exportadora. El proyecto del oleoducto Vaca Muerta Sur será clave para su desarrollo
Detalle de los bloques:
- La adjudicación de estas nuevas áreas llega en un contexto de fuerte crecimiento para YPF en Vaca Muerta. En 2024, la compañía consolidó su posición como el principal productor de petróleo no convencional en Argentina. Durante el último año, registró una ganancia neta de USD 2.393 millones, revirtiendo la pérdida de USD 1.277 millones del año anterior.El desempeño positivo de la petrolera estuvo impulsado por el aumento de las exportaciones y el crecimiento sostenido de la producción. Durante 2024, la empresa invirtió USD 5.041 millones, destinando más del 63% a proyectos en Vaca Muerta. Como resultado, la producción de shale oil alcanzó un promedio de 122.000 barriles diarios, con picos de 138.000 barriles diarios en el último trimestre del año.
La infraestructura tendrá una capacidad inicial de 550.000 barriles diarios y permitirá aumentar las exportaciones de petróleo desde la Cuenca Neuquina hacia los mercados internacionales. Para financiar el proyecto, YPF y sus socias están negociando un préstamo sindicado de USD 1.700 millones, que cubrirá el 70% del costo total de la obra.
La capacidad del oleoducto también contribuirá significativamente al objetivo de YPF de consolidarse como el mayor productor de shale en la región, con una previsión de exportaciones que podría superar los USD 20.000 millones anuales para el 2027. La expansión también tiene como objetivo mejorar la competitividad del crudo argentino en el mercado internacional, especialmente en Asia, a través de la conexión con los VLCC (Very Large Crude Carriers), que optimizarán los costos logísticos.Un informe de la consultora PwC dirigido a inversores internacionales consignó que la Argentina podría alcanzar para 2030 un superávit energético de USD 30.000 millones gracias al desarrollo de Vaca Muerta, un hito que pondría al sector al nivel de las divisas que genera el campo argentino e implicaría un alivio para un país que históricamente sufrió restricciones de oferta de dólares.