28 de noviembre de 2024
El “polvo amarillo” que ayudará a absorber el dióxido de carbono en el aire
El avance de un nuevo polvo desarrollado por químicos podría cambiar la lucha contra el cambio climático. Un informe de Smitsonian Magazine explica cómo funciona y por qué podría superar las tecnologías existentes
Cuando el aire fluye a través del material, las aminas actúan como un filtro selectivo: permiten el paso de la mayoría de los componentes del aire, pero capturan de manera eficaz las moléculas ácidas del CO2.
El COF-999 no solo destaca por su capacidad para capturar dióxido de carbono, sino también por las ventajas que ofrece frente a las tecnologías actuales de captura de carbono. Una de las innovaciones más relevantes es la temperatura requerida para liberar el dióxido de carbono una vez absorbido.
Mientras que la mayoría de los materiales existentes necesitan ser calentados a temperaturas extremadamente altas, el COF-999 libera el CO2 capturado a solo 140 grados Fahrenheit, un proceso que resulta significativamente más económico y menos demandante en términos energéticos.Otra ventaja importante es la porosidad y la estructura química del COF-999, que maximizan su capacidad de absorción al permitir que el aire fluya libremente mientras las aminas capturan selectivamente el CO2.
Así, se diferencia de tecnologías que suelen restringir el flujo de aire y, en consecuencia, aumentar el consumo energético. Estas características posicionan al COF-999 como una herramienta revolucionaria en los esfuerzos para mitigar los efectos del cambio climático.A pesar de las prometedoras características del COF-999, su implementación en escenarios reales aún enfrenta importantes desafíos; este material tiene el potencial de ser aplicado en instalaciones industriales en los próximos años. Sin embargo, antes de alcanzar esa etapa, es necesario someterlo a pruebas en entornos reales para evaluar su desempeño fuera del laboratorio.La escalabilidad del COF-999 también dependerá de su capacidad para mantenerse eficiente a gran escala y de los costos de producción del material. Si bien sus propiedades iniciales parecen muy prometedoras, cuestiones como la optimización de su síntesis y la integración con sistemas de captura de carbono existentes serán claves para determinar su viabilidad económica y ambiental.
Para Omar Yaghi, el desarrollo del COF-999 representa un avance sin precedentes en los esfuerzos para combatir el cambio climático. “No hay nada igual en términos de rendimiento”, aseguró en Smithsonian Magazine.Además de sus capacidades técnicas, el COF-999 plantea un desafío emocionante desde el punto de vista científico. Según Yaghi, la captura de carbono no solo es una necesidad ambiental, sino también un “problema fantástico desde el punto de vista químico”, que impulsa a los científicos a buscar soluciones creativas y eficientes. Esta perspectiva destaca la importancia de la investigación básica y aplicada para enfrentar la crisis climática de manera efectiva.