Miércoles 23 de Octubre de 2024

Hoy es Miércoles 23 de Octubre de 2024 y son las 09:26 -

4 de julio de 2024

El paso de Argentina por la Copa América 95: por qué Passarella borró a Caniggia, el momento íntimo de Simeone y la reacción tras la mano de Tulio

Detalles de un torneo en el que la Selección pudo hacer historia y con el que se inició una sequía histórica de títulos

Resumen Argentina 2-2 Brasil (Copa América 1995)/>
Resumen Argentina 2-2 Brasil (Copa América 1995)

Passarella rearmó el equipo: Perico Pérez de volante central en reemplazo de Ortega para el segundo tiempo. El Brasil de Mario Zagallo comenzó a irse al ataque y empujar en busca del empate. Al minuto 63, el DT argentino armó definitivamente la línea de cuatro en el fondo con el ingreso de Ayala por Batistuta (como respuesta a la entrada de otro delantero brasileño como Túlio Maravilha por Leonardo) y aisló a Balbo en la ofensiva. A falta de un cuarto de hora, mandó a la cancha al Beto Acosta en reemplazo del único punta que quedaba en cancha y estaba exhausto.

Balbo había tenido el tercero con un mano a mano en el que fue bloqueado por Aldair justo cuando estaba por definir frente a Taffarel tras una corrida que pudo ser heroica. Un rato antes del polémico 2-2, Túlio había dilapidado una chance insólita debajo del arco tras asistencia de Roberto Carlos, lo que hacía suponer que no iba a ser la noche para el hasta ahí tetracampeón mundial. Sin embargo, a los 81 Túlio Maravilha extendió su brazo izquierdo para controlar un balón aéreo por centro pasado de Jorginho desde la banda derecha que superó a Zanetti y el árbitro peruano Alberto Tejada no observó la grosera infracción. El delantro brasileño definió de zurda desde un ángulo cerrado, Cristante no achicó bien antes de ir corriendo hasta la posición del juez para protestarle e igualdad.

Desde ese preciso momento se instaló la versión de que a Argentina le “estaban cobrando” aquella histórica mano de Maradona contra los ingleses en el Mundial 86. Passarella, que había sido expulsado antes del 2-2 de Túlio, fue corriendo hacia una televisión para verificar si el brasileño había bajado la pelota con el brazo, algo que constató inmediatamente. Lejos todavía de que se instaurara el VAR, marche preso. A falta de cinco minutos para el final, el referí echó a César Sampaio por voltear a Acosta. Los equipos se quedaron sin energías y ya no se lastimaron. El árbitro pitó el final antes de que su reloj marcara el minuto 46.

Penales Argentina-Brasil Copa América 1995

En la tanda, Roberto Carlos y Túlio convirtieron para Brasil, mientras que Pérez y Acosta lo hicieron para Argentina. Fallaron André Cruz y Diego Simeone. Dunga adelantó a la Verdeamarelha y Fabbri erró y dejó la clasificación a merced de Edmundo, quien no perdonó a Cristante y metió a su equipo en semifinales, instancia en la que el elenco del Lobo Zagallo vencería 2-0 a Colombia antes de perder la final contra Uruguay también en penales (Túlio, paradójicamente, fue el único que falló ese día en el estadio Centenario de Montevideo).

Pasado de revoluciones, Passarella declaró que estaba todo dado para que “voltearan” a Argentina. Y recordó que el juez Tejada había sido protagonista de un arbitraje bochornoso en un partido que el River que dirigía en 1990 perdió en Ecuador contra Barcelona por semifinales de la Libertadores. Maradona diferenció su mano de la de Túlio por una cuestión de teórica alevosía: “No es ningún pícaro porque a él lo vio toda la cancha”. Y hasta el presidente Carlos Saúl Menem calificó de robo lo ocurrido en Rivera, motivo por el cual fue repudiado por Zagallo: “Que le pregunte a Maradona qué es un robo en una cancha de fútbol”.

Puertas adentro, Simeone y Fabbri pidieron disculpas adelante de todos sus compañeros por haber errado desde los 12 pasos. Passarella les agradeció a todos por la entrega ofrecida a lo largo del torneo y les aseguró que a la gran mayoría del plantel la tendría en consideración para las Eliminatorias e, hipotéticamente, para la siguiente Copa América (Bolivia 1997) y el Mundial (Francia 1998). Por dentro tenía claro que algunos no habían superado el filtro y en realidad estaban tachados para el futuro. En nombre del cuerpo técnico, el Kaiser pidió disculpas si en algún momento se habían “pasado de rosca”, por un entredicho que habían tenido Chamot y el Tolo Gallego, quien en su afán de acomodarlo en la cancha se sobrepasó con las indicaciones.

Los 500 kilómetros recorridos en ómnibus desde Rivera a Montevideo antes de volar hacia Buenos Aires fueron con clima sepulcral. La eliminación contra los brasileños no dolía menos por haber transcurrido en un marco de injusticia y polémica. En un contexto completamente distinto, la Argentina de Passarella volvería a marcharse en cuartos de final de la siguiente Copa América. Y más tarde escribiría su historia en la Copa del Mundo que simbolizó el epílogo del Kaiser como DT.

Guardar

Nuevo

Ver más

COMPARTIR:

Comentarios