Tras 14 años de estar prófugos  de la justicia, efectivos de Interpol detuvieron en la ciudad de  Aveiro, en Portugal, a José “Ruso” Lohrmann y a José "El Potrillito" Maidana, los principales acusados por el secuestro de Christian Schaerer.

Lohrmann y Maidana fueron sindicados por la justicia como los jefes de la banda que secuestró al joven Schaerer, de 21 años, en  Corrientes, en el año 2003. 

A pesar de haber cobrado un rescate de 277 mil dólares para su liberación, el joven permanece desaparecido desde entonces.

Según confirmaron fuentes oficiales, los dos acusados habían  sido detenidos en Portugal por un robo a mano armada, y se habían  identificado como José Luis Guevara Martínez, ciudadano guatemalteco, y Nikola Petkov, ciudadano búlgaro.

Tras ser interrogados, la policía comprobó que los imputados  evidenciaban coincidencias fisonómicas con Lohrman y Maidana,  por lo que las Divisiones Dactiloscopia e Individualización Criminal llevaron a cabo las pruebas de rigor y confirmaron que se trataba de ellos, debido a la información que existía sobre sus huellas digitales.

Según las fuentes, en el año 2005 se descubrió que Maidana residía en Portugal, y usaba el nombre de Jorge Miguel Tavares da Costa y con ese nombre, había efectuado envíos de dinero a su  hermana a través de la empresa Western Union. 

Desde entonces, se inició un intenso intercambio de datos  entre la Policía Federal y la policía de Alemania, Brasil y Portugal. A los ahora detenidos también se los señala por la organización del secuestro, en el año 2002 del empresario Claudio Stefanich en Villa Adelina; y también se le atribuyen varios crímenes en Paraguay.

Allí fueron acusados por los secuestros de Cecilia Cubas, hija  del expresidente paraguayo Raúl Cubas Grau; de las empresarias gastronómicas María Elizeche y María Elena Vargas; así como de la  muerte de un niño de 10 años a causa de una sobredosis de calmantes.

También están acusados de la tentativa de homicidio de Juan Pedro Schaerer, padre de Christian.