12 de noviembre de 2025
Acusaron de mentiroso al influencer que denunció que golpearon a su abuela: los videos de su defensa

El creador de contenidos Tomás Mazza difundió que la imagen de la mujer golpeada era vieja. Pablo Pizzurno, quien se dedica a verificar si suplementos y alimentos tienen realmente la composición registrada en sus etiquetas, le respondió y sumó a la víctima del ataque a sus posteos audiovisuales
—¿Cuánto?
Todo comenzó este lunes, cuando se viralizaron los videos de Pizzurno donde contaba: “Tocaron el timbre de mi casa en Buenos Aires, donde ya no vivo. Mi abuela tiene 95 años y vive en la planta baja. Atendió, le preguntaron por mí, respondió que yo no vivía más ahí y le pegaron una piña. La golpearon y cayó al suelo”.
Y acusó que, por su actividad, comenzó a recibir amenazas de muerte, cartas documento e intentos de hackeo por parte de lo que él mismo denomina “la mafia de los suplementos”. No dio nombres.Fuentes policiales consultadas por Infobae precisaron que personal de la Comisaría Vecinal 15C de la Policía de la Ciudad fue a la casa de Pizzurno para esclarecer el presunto ataque y que, de oficio, la investigación quedó en manos de la Fiscalía en lo Penal, Contravencional y de Faltas N°7, a cargo de De Sanctis.Acto seguido, lanzó: “Es totalmente mentira. Yo voy a adjudicar las pruebas. Nadie mandó a golpear a la abuela de nadie. Estuve hablando con una chica que conoce a este chico y me contó que la abuela de este chico se cayó en la calle el 17 de septiembre. Está utilizando esto para vincularme a mí, de que nosotros la mandamos a golpear. Voy a adjuntar pruebas y lo van a ver todo”.
Y entonces mostró las capturas que se habían viralizado de WhatsApp, donde estaba la foto de la abuela golpeada y se escuchaba a Pizzurno decirle a un tal Joana: “Estoy con mil quilombos. Resulta que la semana pasada se cayó mi abuela en la calle. Se hizo mierda. Bueno, resulta que el viernes pasado también se cayó mi vieja... Mi abuela tiene 95 y mi vieja tiene 66. Estoy suspendiendo todas las cosas... No voy a poder ir, no puedo planificar, tengo mi cabeza hecha mierda, ¿entendés?“.Las redes sociales se volvieron entonces una maraña de teorías conspirativas, de gente que tildaba a Pizzurno de mentiroso, que decía que había usado a la abuela, y varias cosas más.“Hago este video porque acabo de salir de la Fiscalía y me entero por historias que hizo Tomás Massa, y me escriben periodistas, sobre una captura de una conversación, que yo sé que es una persona que me había invitado a un congreso, donde yo le mandé la foto que subí diciendo que mi abuela se había caído. Ahora, lo que ustedes no entienden, lo que no se entiende es esto: mi familia y yo decidimos resguardar toda la integridad hasta que no dimos más”, fue la defensa del influencer.
Y siguió: “Yo no tengo por qué andar diciéndole a todo el mundo lo que me pasa y cuando le escribí a una persona, que me había invitado un congreso, que no podía ir, porque estaba mal por lo que había pasado, decirle: ‘No, mirá, a mi abuela le pegaron y me amenazaron de muerte’. Ustedes entienden esto, ¿no?“. Acto seguido dijo que ni a sus amigos les contó.Luego, Pizzurno le mandó un mensaje al creador de contenidos que lo acusó públicamente de mentiroso: “No sé por qué hace esto, se lo pido por... Tomás Massa, te lo imploro. Te voy a etiquetar. Por favor, déjanos a mí y a mi familia en paz”.Y él le respondió: “Yo te amo más, ¿sabés? Lamentablemente, tengo que hacer esta historia con mi abuela acá, por las historias que hizo Tomás Massa“. En ese contexto, comentó que le aconsejaron hablarle al creador de contenidos: “Yo nunca dije que vos atacaste a mi abuela, nunca dije que tu proteína es mala, no estoy en contra tuya”.
Entonces, cuando la Policía anoche, cinco minutos antes de la medianoche, fue a la casa del influencer, él les dijo que no quería hacer la denuncia. Ante esto, se armó “expediente de constancia”.


