La desregulación del mercado eléctrico que impulsa el Gobierno podría ser positiva para las generadoras, según Fitch
Las reformas regulatorias recientes abrieron perspectivas para las empresas del sistema energético nacional. Un giro relevante en los esquemas de contratos y tarifas. El riesgo de las distribuidoras
>El plan de
liberalización del mercado eléctrico argentino, impulsado por el Gobierno de
Javier Milei mediante el
Decreto 450/2025, introdujo cambios de fondo en la estructura y operatoria del sistema energético nacional. Según un informe emitido por la calificadora
Fitch Ratings,
En definitiva, el esquema propuesto plantea la libre contratación entre oferta y demanda. Fitch Ratings consideró que el plan oficial podría fortalecer los perfiles crediticios de empresas generadoras y favorecer inversiones en capacidad de generación eficiente. Antes de la reforma, CAMMESA funcionaba como comprador centralizado, se encargaba de las compras de combustible, el despacho y las liquidaciones a precios fijos, y dependía de subsidios del Estado nacional para saldar la diferencia entre el costo real de generación y la tarifa que pagaba el usuario final.El Decreto 450/2025 trazó un nuevo esquema para transferir los acuerdos de compra de combustible suscriptos por CAMMESA y redefinió los criterios de remuneración para las generadoras térmicas, otorgando mayor espacio para que cada compañía logre mejores condiciones en la adquisición de insumos energéticos, según detalló Fitch Ratings.De acuerdo con el reporte de la calificadora, la desregulación beneficiaría especialmente a compañías generadoras, como AES Argentina Generación SA (AAG), MSU Energy SA y Pampa Energía SA. Esta transformación permitiría firmar acuerdos de compra de energía (PPA) a precios más competitivos y reducir la exposición de contraparte frente al Gobierno, al quitar a CAMMESA como intermediario central. Además, podrían suscribir PPA bilaterales con corporaciones internacionales solventes presentes en el país, un mecanismo previamente disponible solo bajo los esquemas RenoVar y MATER.Fitch Ratings subrayó que las generadoras con mayor proporción de su capacidad bajo el esquema Energía Base serían las más favorecidas por los precios de mercado. En el caso de AES Argentina Generación SA (AAG), la empresa gestiona cerca de 3.000 megavatios (MW), de los cuales el 65% de los ingresos provienen de Energía Base, si se suma la recaudación vinculada al FONINVEMEM. El nivel de apalancamiento de AAG, alrededor de 2,5 veces, otorga espacio para ampliar inversiones en generación eficiente una vez garantizados los incentivos de precios. Los flujos de caja encuentran respaldo en cuentas predecibles denominadas en dólares por inversiones del FONINVEMEM (Fondo para Inversiones Necesarias que Permitan Incrementar la Oferta de Energía Eléctrica en el Mercado Mayorista), que aportan unos 50 millones de dólares por año hasta 2026.El informe también resaltó el caso de MSU Energy SA, poseedora de 750 MW en unidades de ciclo combinado, que logró eficiencia de operación. Esta firma mantiene acuerdos PPA con CAMMESA por 450 MW y otro contrato PPA a 15 años para 300 MW, que vence en 2035. Fitch remarcó que la liberalización del mercado tenderá a premiar a los generadores más eficientes mediante la competencia.
Sobre las empresas distribuidoras, la calificadora remarcó que el impacto concreto de la reforma todavía presenta indefiniciones. Dos de las principales compañías, Empresa Distribuidora y Comercializadora Norte SA (EDENOR) y Empresa Distribuidora de Electricidad de Mendoza SA (EDEMSA), aparecen en una situación de expectativa: el decreto creó un mecanismo progresivo para transferir los acuerdos PPA celebrados originalmente con CAMMESA directamente a las distribuidoras, que cubrirían así la mayor parte de su demanda a través de contratos con generadores y no mediante la intermediación de CAMMESA. Este mecanismo podría generar mayores costos de abastecimiento.El informe señaló que este proceso introduce