4 de septiembre de 2025
El caso del asesino serial de Jujuy: ya son cuatro las víctimas identificadas

Se trata de Miguel Quispe y Juan Ponce, cuyos ADN fueron encontraron entre los rastros biológicos levantados de la casa de Matías Jurado
Y comentó: “Tenemos varios perfiles genéticos para seguir cotejando, y entendemos que podemos seguir teniendo más perfiles porque hay todavía evidencias que seguimos procesando. Son más de 300 muestras”.
También aclaró Beller que todos los ADN hallados “son masculinos”. Y acotó el fiscal: “Encontramos una parte femenina que coinciden con la madre y la sobrina. Pero ya es parte de las familias que normalmente se encuentran en las casas”.Beller lo contó este martes: “Lo hizo en el mismo sentido de la primera, que era simplemente negar los hechos y negar cada uno de los puntos de la posición de los fiscales en esa audiencia... Ha negado ser partícipe de esos hechos, ser el autor, ha negado estar con cada una de esas personas, haber subido a ese taxi. Ha negado todo lo que se le ha imputado y atribuido y tiene el derecho de hacerlo, por supuesto”.
El expediente también investiga la posible relación de Jurado con los desaparecidos Juan Carlos González (60) y Sergio Alejandro Sosa (25). Además, hay dos otros dos casos que aún no están formalmente ligados a la causa, pero siguen bajo investigación.El fiscal regional además comentó que el sobrino de Matías Jurado, pieza clave en contar lo que sucedía en esa casa del barrio Alto Comedero de San Salvador de Jujuy, quedó a cargo de la Dirección de niñez y adolescencia dela provincia, pero advirtió que hay una “tía también que está colaborando”.
Según la reconstrucción de los investigadores y los testimonios recabados, presentaba una secuencia con patrones reiterados:- Los investigadores sospechan que, dentro de la vivienda, Jurado sometía a sus víctimas y procedía a descuartizarlas. Algunos restos humanos eran enterrados en el mismo domicilio, otros se quemaban con la finalidad de reducirlos y parte de ellos se colocaban en bolsas de consorcio que luego eran descartadas en basurales de la zona.
Las pericias psicológicas concluyeron que comprende la criminalidad de sus actos, aunque todavía intentan establecer el móvil y el perfil del sospechoso, que en la audiencia de imputación se pronunció inocente.