16 de abril de 2025
“Quiero laureles verdes, reales, vivos, no esos de oro o metal”: cómo es el primer monumento realizado en honor a Borges

Entre viñedos mendocinos, crearon una obra única que refleja el universo literario del célebre escritor argentino a través de símbolos como espejos, relojes de arena y un libro abierto
Coate, además, era un apasionado por los laberintos. En 1979 tuvo un sueño en el que Susana Bombal jugaba un papel clave: entendió entonces que el homenaje a Borges debía ser un laberinto y no una estatua decorada de ángeles.
Años más tarde, ese sueño llegaría a manos de Camilo Aldao, sobrino de Susana y heredero de sus pertenencias. Al encontrar la carta donde Coate relataba su visión, Aldao interpretó que su tía le dejaba una misión: construir el laberinto.Decidido a cumplir ese mandato, Camilo Aldao viajó a Londres para conocer a Randoll Coate. El diseñador le entregó personalmente el proyecto del laberinto, confiándole la tarea de materializarlo. Tras múltiples gestiones y diez años de intentos fallidos en la ciudad de Buenos Aires junto a María Kodama y Carlos Thays (nieto), finalmente decidieron ubicarlo en un lugar cargado de significado: la finca Los Álamos, la casa natal de Susana Bombal en San Rafael.El Laberinto de Borges abarca una superficie de 8.700 metros cuadrados y está conformado por 7.150 plantas de buj. Diseñado como un “libro abierto al universo”, cuenta con más de 2.500 metros de senderos que solo revelan su simbología completa al observarse desde la torre de 20 metros de altura, especialmente construida para tal fin.
Este conjunto de símbolos refleja algunos de los temas centrales en la obra de Borges, como el tiempo, la memoria, el infinito, los espejos y la identidad.
En 2020, el Laberinto de Borges fue galardonado con el premio Traveller’s Choice de Tripadvisor, distinción otorgada a los destinos turísticos que se ubican dentro del 10% de las atracciones más populares del mundo, según las opiniones de los visitantes. El sitio fue destacado por su originalidad, su potencia simbólica y su capacidad para ofrecer una experiencia de turismo cultural.