15 de abril de 2025
Donald Trump todavía cree posible llegar a un acuerdo con China y abre una ronda de negociaciones con Corea del Sur

El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, le respondió al ministro de Comercio chino, quien había calificado los aranceles impuestos por el presidente estadounidense como una “broma”
Bessent sostuvo que un eventual acuerdo con China requeriría un enfoque radicalmente distinto al de pactos previos. “Tiene que venir de arriba, involucrando a Trump y al presidente Xi Jinping”, afirmó, subrayando que las negociaciones deberán contar con respaldo al más alto nivel político.
En este contexto, el secretario del Tesoro descartó que la separación económica total entre las dos mayores economías del mundo sea inevitable. “No tiene por qué haber desacoplamiento, pero podría haberlo”, declaró, señalando que la dificultad del proceso radica en que “China es tanto nuestro mayor competidor económico como nuestro mayor rival militar”.
Por otro lado, Bessent confirmó que la semana próxima comenzarán negociaciones con Corea del Sur, como parte de una agenda de contactos que incluye también a Vietnam y Japón. “Tuvimos a Vietnam la semana pasada, a los japoneses el miércoles, y Corea del Sur la próxima semana. Esto va a ir rápido”, declaró a Bloomberg.Las negociaciones con Seúl se desarrollarán en un momento crítico, debido a que Trump ha amenazado con imponer aranceles del 25% a las importaciones automotrices, lo que afectaría especialmente al sector industrial surcoreano. En 2024, las exportaciones surcoreanas relacionadas con el sector automotor hacia Estados Unidos alcanzaron los 42.900 millones de dólares, mientras que el déficit comercial estadounidense con Corea del Sur superó los 66.000 millones de dólares en bienes.Como respuesta preventiva, el gobierno surcoreano anunció la semana pasada un paquete de apoyo de emergencia de 2.000 millones de dólares para proteger a sus fabricantes de automóviles ante el posible impacto económico de las medidas estadounidenses.Estados Unidos continúa presionando por una reestructuración de sus relaciones comerciales globales, exigiendo reducciones significativas de sus déficits con socios clave. Las nuevas conversaciones con aliados como Corea del Sur forman parte de esta estrategia mientras Washington mantiene la puerta abierta a una eventual reconciliación económica con Beijing.
(Con información de AFP y Reuters)