31 de marzo de 2025
Neurocientíficos crean un “traductor” digital para mejorar los estudios cerebrales

El nuevo software desarrollado por UCLA Health promueve un “lenguaje común” que podría acelerar los avances en la neurociencia y la medicina
El Network Correspondence Toolbox no solo facilita la comparación entre diferentes atlas cerebrales, sino que también permite identificar patrones comunes y reproducibles entre ellos. Esto podría llevar a la adopción de estándares más sólidos en la investigación cerebral, lo que, a su vez, mejoraría la comprensión de las conexiones cerebrales y su relación con diversos trastornos.
También tiene implicaciones prácticas para la medicina. Según publicó Medical XPress, los métodos de imágenes cerebrales, como las resonancias magnéticas, son cada vez más utilizados para investigar las causas de síntomas y trastornos neurológicos y psiquiátricos.“Espero que la gente use esta herramienta para encontrar puntos en común en los hallazgos que, de otro modo, podrían haber quedado ocultos debido a la falta de coherencia en la denominación”, señaló Uddin.
El impacto de esta herramienta no se limita a un solo laboratorio o institución. Al ser de código abierto, el Network Correspondence Toolbox está disponible para investigadores de todo el mundo, lo que fomenta la colaboración y el intercambio de datos.Además, podría tener aplicaciones más allá de la investigación básica. Una mejor comprensión de las redes cerebrales podría contribuir al desarrollo de tratamientos personalizados para trastornos como la depresión, la esquizofrenia o las enfermedades neurodegenerativas.
Al identificar cómo las alteraciones en las conexiones cerebrales influyen en los síntomas, los médicos podrían diseñar intervenciones más específicas y efectivas.El desarrollo del Network Correspondence Toolbox marca un hito en la investigación cerebral, ofreciendo una solución a un problema que ha limitado el progreso en el campo durante décadas.“Podría cambiar nuestra forma de pensar sobre la división del cerebro”, afirmó Uddin, quien agregó: “Si tantos grupos diferentes crean atlas distintos con ligeras diferencias, ¿podría esto ayudarnos a identificar los patrones más comunes y reproducibles, y a adoptar más estándares que se basen en esos puntos en común?”.