10 de marzo de 2025
Así fue la caída del diputado chileno Joaquín Lavín Jr, el “alcalde en las sombras” acusado de corrupción

El parlamentario y esposo de Cathy Barriga, la ex edil de la comuna santiaguina Maipú actualmente en prisión preventiva, fue querellado por tráfico de influencias y fraude al fisco
En concreto, se acusa al parlamentario de colocar a gente de su círculo cercano en la municipalidad y a Domínguez, de ser “la persona mediante la cual el parlamentario controlaba el Municipio”.
El cuestionado legislador, quien ahora podrá ser desaforado y luego formalizado, arremetió contra el actual alcalde de Maipú al ser consultado al respecto en el Congreso -donde se le ve poco, según sus propios pares-, señalando que “ya no son una o dos querellas, sino que son dos, tres, cuatro, cinco a estas alturas. Esta es una estrategia que a él le trae muchos réditos políticos“.
Hijo de Joaquín Lavín Infante, ex alcalde, ex ministro, ex candidato presidencial y una de la figuras más importantes de la derecha chilena, Joaquín José Lavín León nació en 1979 en Santiago y es el segundo de los siete hijos de Lavín Infante y la ex concejal María Estela León Ruiz, una familia orgullosamente Opus Dei.
Estudió en dos de los colegios más caros del país y tras recibirse de Ingeniería Comercial en la Universidad de Los Andes - también privada -, hizo sus primeras armas en política en las campañas de su padre siendo su coordinador en las eleciones presidenciales que perdió en 1999 contra Ricardo Lagos y de 2005, contra Michelle Bachelet y Sebastián Piñera.Su papel de jefe de campaña a la reelección del diputado Alberto Cardemil, en 2009, lo acercaría a Renovación Nacional, partido que apoyó junto a la UDI su primera candidatura fallida a alcalde de Maipú, en 2012.
En 2009 se casó por todo lo alto en la iglesia Los Sacramentinos de Santiago con Cathy Barriga y junto a ella, hizo campaña en 2013 - siendo ya militante UDI- y logró un escaño como diputado por el distrito 20 de Maipú, cargo en el que fue reelecto para los períodos 2018-2022 y 2022-2026.Hay que reconocer que a sus 51 años, Cathy Carolina Barriga Guerra ha sabido hacerse un nombre, primero como un sexy personaje de la farándula criolla y luego como la polémica edil de Maipú. Es considerada como un referente por muchas mujeres por ser una ‘self -made woman’, es decir, una mujer que se ha hecho a sí misma. Desde la vereda del feminismo, sin embargo, no es bien vista.
Su padre trabajaba en un casino y su madre, peluquera, la instó de pequeña a presentarse a concursos de belleza. Partió desde abajo, trabajando como promotora en un supermercado, y pronto fue elegida “Reina de Playas y Piscinas”. El año 96 debutó con su sexy personaje “La Robotina” en el programa televisivo “Maldita Sea”; el 2000 formó parte del elenco del popular programa juvenil “Mekano”, bailando escasa de ropa y hacienda noticia por sus romances, y también participó en un reality show.Sin embargo, a pocos meses de asumir como alcaldesa, Barriga despidió a casi 500 funcionarios, lo que se convirtió en una pesadilla judicial y financiera cuando muchos de ellos comenzaron a querellarse contra el municipio.
Luego vinieron otras denuncias en Contraloría, por falta de probidad al promocionar una marca de lentes durante su ejercicio como funcionaria estatal y gastos excesivos en la presentación de su cuenta pública. También por reiteradas inasistencias a los concejos municipales; uso de recursos municipales para campañas políticas del ex presidente Sebastián Piñera y de su esposo, y la utilización excesiva de su imagen personal en la difusión de actividades del municipio.En enero de 2019, el Centro Veterinario Municipal de Maipú fue decorado con fotografías suyas posando junto a mascotas y a fines de ese mes, instalaron una gigantografía con su rostro en la Primera Granja Alimentaria Municipal.
A inicios de mayo de 2019, se supo que el municipio había gastado más de $1.850 millones (poco más de USD 2 millones) durante el año 2018 en la realización de doce eventos artísticos y culturales que incluyeron la contratación de imitadores y grupos musicales. A ellos su sumaron más de $2 mil millones (USD 2,3 millones) desembolsados en organizar tres festivales llamados “Maipeluza”, nacidos para festejar las fiestas patrias, en uno de los cuáles su hijo interpretó la canción oficial y se llevó un galvano.La debacle comenzaría el 1 de noviembre de 2021, cuando mediante un reportaje transmitido por T13, el entrante alcalde de Maipú, Tomás Vodanovic, denunció a la administración de Barriga por el desvío de $1.900.000.000 (poco más de USD 2 millones), los cuales estaban destinados al desarrollo de la sanitaria municipal SMAPA, pero fueron utilizados para construir un spa para adultos mayores.
En el libelo de 44 páginas presentado por los abogados de la municipalidad de Maipú -al que accedieron varios medios-, destaca la declaración de Juan Alberto Silva, dueño de la Imprenta MMG S.A., quien declaró haber fabricado material gráfico para las campañas de Lavín Jr. por varios años. Tras acumularse una deuda millonaria, acordaron que el empresario le enviaría una serie de facturas ideológicamente falsas, las que el legislador rindió en el Congreso.Dichas facturas finalmente fueron 19, por un total de $17.882.310 (poco más de USD 19 mil) y hace pocas semanas, tratando de ponerse el “parche antes de la herida”, Joaquín Lavín León restituyó poco más de $7 millones de pesos (USD 7.500), a la Corporación de la Cámara de Diputadas y Diputados por las cuestionadas facturas emitidas al Congreso, reconociendo tácitamente la irregularidad.
Según el testimonio de la encargada de finanzas de la imprenta MMG S.A -identificada como M.-, a un mes de asumir Cathy Barriga, su esposo envió un correo al entonces coordinador de comunicaciones de la Alcaldía y la empresa comenzó a recibir información privilegiada para acceder a licitaciones y contratos con el municipio de Maipú.
La testigo agregó, además, que Arnaldo Domínguez era “el contacto que yo tenía para cobrar las facturas de: Joaquín Lavín en todos sus vínculos comerciales; Municipalidad de Maipú, o sea de Cathy Barriga que era la alcaldesa de Maipú de ese entonces”.
Individualizado como “el emisario” en la querella estampada, Arnaldo Domínguez es sin duda pieza fundamental en este puzzle, pues era quien transmitía las órdenes de Lavín.
Otra prueba de la mano de Lavín en las decisiones del municipio son los correos entre él y su esposa en los que ordena despedir a casi 500 trabajadores vinculados al anterior alcalde.
Finalmente, de los 496 funcionarios desvinculados, 72 demandaron al municipio, lo que implicó el desembolso “de más $1.149 millones de pesos (más de USD 1,2 millones) en pago de condenas, transacciones o avenimientos”.