13 de diciembre de 2024
Cómo es y cuánto cuesta vivir en un crucero durante un año recorriendo el mundo

Disfrutar de servicios exclusivos, descubrir diversos destinos y trabajar remotamente desde un entorno marítimo
Los precios de estos cruceros varían considerablemente dependiendo de la duración, el tipo de cabina y los servicios incluidos. Para el crucero de Life at Sea Cruises, que ofrece una travesía de tres años alrededor del mundo, los precios empiezan en 30.000 dólares al año por persona, lo que significa una tarifa mensual de alrededor de 2.500 dólares.
Aunque este costo para gran parte de la población mundial es elevado, los beneficios a bordo incluyen: alojamiento cómodo, comidas ilimitadas, acceso a instalaciones de trabajo, actividades de ocio y la posibilidad de explorar los destinos más icónicos del planeta.Los pasajeros tienen la libertad de abordar cualquier barco de la flota y visitar una serie de destinos internacionales. Además, los cruceros de Virgin ofrecen un enfoque orientado a la experiencia de lujo, con comodidades como piscinas, gimnasios, restaurantes gourmet y más, asegurando que la experiencia sea placentera incluso para quienes buscan lujo en su viaje.
Aparte del alojamiento y la comida, que en la mayoría de los casos están incluidos, los cruceros de larga estancia como los de Life at Sea Cruises y Victoria Cruises ofrecen una serie de servicios diseñados para hacer que los pasajeros se sientan cómodos en su nuevo hogar flotante. En el caso del Victoria Cruises, que ofrece una travesía de dos años por el mundo, el precio de 2.400 dólares mensuales por persona incluye comidas, acceso a internet (importante para quienes necesitan trabajar desde el mar), gimnasio, piscina, y atención médica a bordo. Además, los pasajeros pueden disfrutar de entretenimiento y actividades como clases de danza y música, así como fiestas temáticas y eventos sociales con otros viajeros.Estos barcos están diseñados para ser verdaderos hogares flotantes. Los pasajeros pueden disfrutar de días tranquilos en el spa o en las piscinas, asistir a conciertos, o simplemente disfrutar de la vista desde su balcón privado. Los equipos de entretenimiento a bordo ofrecen cine, teatro, actividades recreativas y clases de cocina, mientras que los restaurantes sirven platos de la más alta calidad.
Por supuesto, no todos los pasajeros buscan un lujo extremo. Algunas opciones, como el Victoria Cruises, consisten en una experiencia similar, pero más asequible, permitiendo que quienes cuentan con un presupuesto limitado puedan embarcarse en la aventura sin invertir todos sus ahorros.