26 de noviembre de 2024
Un conductor borracho chocó 4 autos en Mar del Plata: en uno estaba Thiago Franco, el chico atropellado hace 10 años
El joven y su madre fueron hospitalizados, al igual que el imputado, quien conducía con 1,90 gramos de alcohol por litro de sangre
También se lesionó el conductor que provocó el accidente, por lo que fue derivado al mismo centro de salud.
Tras el hecho, la Policía Científica se hizo presente en la escena. Además, el fiscal Rodolfo Moure dispuso la detención del autor del choque, quien está imputado por “lesiones culposas agravadas”. Asimismo, encomendó su traslado hacia la Unidad Penal N.º 44 de Batán.
Fuentes del caso señalaron que se trata del cuarto accidente que ocurre sobre la ruta 88 en lo que va del año y el mantenimiento y mejora de este tramo fue foco de conflicto entre el intendente de General Pueyrredón, Guillermo Montenegro, quien viene reclamando en diversas oportunidades que haya inversión, y el gobernador Axel Kicillof.A su vez, otra de las ocupantes resultó gravemente herida, mientras que el chofer del rodado de mayor porte también sufrió lesiones.
Otros dos accidentes sucedieron en noviembre. Uno de ellos tuvo lugar en la intersección de la ruta con la calle 30 de Batán, cuando un Ford Escort y un Fiat Siena chocaron. Tras el impacto, cuatro personas resultaron heridas, entre las que se encontraban un niño de apenas 3 años junto a sus padres.El 29 de marzo de 2014, en el kilómetro 19 de la ruta 226, cerca de Sierra de los Padres, Eduardo “Lalo” Ramos conducía alcoholizado a bordo de su Mercedes Benz. En ese momento, chocó desde atrás al Chevrolet Corsa en el que viajaba la familia de Thiago Joel Franco.
La víctima, que tenía apenas cuatro años, sufrió triple fractura de cráneo y debió ser internado en el Hospital Interzonal Especializado Materno Infantil.“Es muy difícil poder poner en palabras lo que uno siente como padre al ver el deterioro de un hijo que era sano y que por culpa de la imprudencia de una persona está sufriendo así. Perdió el poder caminar, no tiene una vida social, no puede ir al colegio, está conectado casi las 24 horas del día a una bomba para la alimentación entera”, detalló Rocío, su madre, meses atrás, sobre la salud de Thiago.