13 de noviembre de 2024
José Miguel Insulza: “Las relaciones de Chile con Argentina nunca fueron mejores que con Menem y con Kirchner fueron difíciles”

El senador, ex ministro y ex titular de la OEA destacó que la relación de Milei y Boric es normal y afirmó: “No siempre es más fácil entenderse con quien uno tiene afinidad política”. Estuvo en Argentina por los 40 años del Tratado de Paz y Amistad que evitó una guerra. Y defendió su condición de socialista
Cuando se le pidió un análisis sobre las actuales tensiones políticas entre los presidentes Javier Milei y Gabriel Boric, Insulza reconoció que ambos líderes representan ideologías tan dispares que parecen “agua y aceite”. Sin embargo, enfatizó que esta diferencia no representa un obstáculo para la cooperación bilateral. A pesar de sus marcadas diferencias políticas y la retórica encendida que caracteriza a Milei, ambos presidentes han mantenido una relación pragmática y respetuosa, evitando enfrentamientos públicos y mostrando un enfoque responsable en la diplomacia.
-Le pido una reflexión sobre los 40 años del Tratado de Paz y Amistad que firmaron Argentina y Chile.
-¿Qué significa primero para Chile el tratado y después para las relaciones entre dos países que tienen tanto en común y también algunas divergencias?
Lo primero que diría, tanto para Chile como para Argentina, significa que dieron un ejemplo de que se pueden solucionar las controversias armoniosamente. Pero ya hablando con posterioridad creo que la relación entre Chile y Argentina mejoró mucho a partir de la firma del acuerdo. Tuvimos, por ejemplo, el arbitraje del caso de Laguna del Desierto, que lo perdió Chile, pero lo acatamos y lo aceptamos, porque entendimos que habíamos nombrado un tribunal y había que hacerlo. No hubo los escándalos que aparecieron en otras ocasiones por temas limítrofes.Desgraciadamente eso se perdió con el gobierno de Néstor Kirchner, que realmente no funcionó. Ahora creo que si hubiéramos diseñado el gaseoducto como nosotros queríamos, atravesando directamente de Neuquén hacia Concepción y de ahí subiendo por Chile hacia hasta Santiago, eso habría sido más difícil de cortar el gas como se hizo, que era viniendo directamente a Mendoza y de ahí hacia Santiago.
Pero esos son otros tiempos y estamos teniendo cooperación con Argentina en materia de gas, tenemos un buen comercio con Argentina. Nosotros nunca nos hemos quejado de ser deficitarios en sentido que Argentina exporta mucho más a Chile que Chile a Argentina, porque Argentina es un buen mercado de productos agrícolas, sobre todo. Tenemos mucho de producción agrícola argentina, de Paraguay, también de Uruguay, porque somos países que no no tiene suficiente producción como para producir todo lo que necesita. Pero ese es el libre comercio: lo compensamos con los minerales que vendemos en otros países.-¿Cree que hay un contexto para que eso pueda pasar?
Hay buenas relaciones. Probablemente uno podría decir que los dos gobiernos están un poquito separados, pero hemos mostrado que separados y todo nos llevamos lo más bien. O sea, es más fácil. Aprendí en la política exterior, que no siempre es más fácil entenderse bien con el que uno tiene mucho más afinidad política.Por ejemplo, nosotros nunca hemos tenido mejores relaciones con Perú que cuando estaba Alberto Fujimori, ni mejores relaciones con Argentina cuando estaba que cuando estaba Carlos Menem. Y ninguno de los dos eran de los colores políticos nuestros. Después tuvimos relaciones con Alan García y con Néstor Kirchner y las relaciones fueron un poquito más difíciles.
-Aunque parecían que en términos ideológicos eran más parecidos.-Antes de seguir avanzando, le quiero preguntar ¿cómo vio la Argentina con esta visita relámpago? ¿Qué vio?
Lo que vimos es que todo el mundo es cauto. La cautela es la característica dominante, no hay una condena a lo que se está haciendo, ni mucho menos, como tampoco una bendición a lo que está pasando. Va a haber una espera de que todo esto pueda culminar con mayor estabilidad económica. No fuimos a los barrios populares así que no podría contestar más que eso.-Son accidentes que pasan en 5000 kilómetros de frontera y generalmente no deberían llevar a problemas. Lo que pasa es que a veces algunos amigos de la prensa lo disfrutan más y preguntan mucho y algunos parlamentarios aprovechan de vestirse de patriotas, diciendo que hay que defender a la Patria. Pero esta vez no pasaron a mayores en ningún caso.
Como el agua y el aceite, pero ninguno de los dos nunca había estado en un cargo de este tipo. Y creo que en ese caso todavía a los dos, por ambos lados, siempre falta entender que el presidente tiene necesariamente que hacer algunos gestos como un tema de Estado. Además, en este caso no estamos hablando de líderes que han llegado al gobierno de manera casual: llegaron elegidos por su pueblo y la obligación de ellos, por lo tanto, es representar a su pueblo y entenderse. Creo que hemos cumplido en eso.
-Me interesa abordar un tema que empieza a ser importante para Argentina, que es el desarrollo minero. El Gobierno tomó una serie de medidas de estímulo para el sector. ¿Qué lecciones puede compartir Chile para desarrollar esa actividad, teniendo en cuenta que es central para la economía de su país?
En Chile tuvimos el problema -que hay muchos en el mundo más progresistas- que a veces piensan que el medio ambiente y la producción minera son incompatibles. Hemos tenido algunas dificultades, pero creo que la creo que las estamos corrigiendo bien. La lección que yo diría es esa: si Chile tiene la minería que tiene, Argentina la puede tener también, porque está el otro lado de la Cordillera, porque no creo que al otro lado de Los Andes hayan cambiado tanto los los tipos de yacimientos que hay. Teniendo en vista los temas del medio ambiente, pero con un sentido mucho más constructivo en el sentido de decir “mire, vamos a sacar los minerales dando todas las posibilidades de mantener el ambiente”.
Mucho. Hubiera querido que Vaca Muerta se hubiera empezado hace muchos años para que el gas viniera de Neuquén a Concepción y de ahí por un gasoducto hacia el Norte. Eso habría significado que no se hubiera interrumpido nunca el gas. Miramos con muy buenos ojos Vaca muerta. Vemos con muy buenos ojos la posibilidad de que Vaca Muerta sirva para que desde el puerto de Talcahuano, que es prácticamente Puerto de Concepción, sea útil para la exportación de gas que Argentina desea hacer. Sería un ejemplo además que se podría podría ser viral en otras partes del país, en que tenemos mucho más cosas así que hacer que las que estamos haciendo.
-Fue secretario general de la OEA. Tiene experiencia diplomática internacional, está llegando a la presidencia de Estados Unidos de nuevo Donald Trump. ¿Cómo está viendo primero Estados Unidos y después el mundo en general?Respecto a las relaciones internacionales, un usando un lenguaje norteamericano, en la dicotomía aislacionismo - internacionalismo, Trump es más una aislacionista. Él no cree en la idea de que Estados Unidos esté obligado a construir un orden mundial mejor, ni mucho menos. Más bien, cree que la política exterior -como dijo algún ideólogo en los tiempos de la Guerra Fría- “no tenemos política exterior para cambiar el mundo, tenemos política exterior para poder hacer política en Estados Unidos como nosotros queremos”.
-Cree que Milei puede convertirse en un interlocutor privilegiado con Donald Trump. ¿Puede pasar eso?
-Le voy a hacer una pregunta incómoda y usted me responderá lo que pueda y lo que considere apropiado. El presidente Milei tiene una narrativa bastante dura con respecto al socialismo. ¿Qué piensa usted de eso?
Pero economía de mercado hay muchas y el tema de la distribución del ingreso y la distribución de la riqueza es un tema muy central en las sociedades de hoy. Creo que una política socialista democrática es válida.
Por eso, si Argentina tiene un camino distinto, está bien. Dentro del marco de la economía y de la geopolítica podemos entendernos mucho mejor.