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29 de septiembre de 2024

Cuánto cuesta refaccionar el baño y la cocina: qué tener en cuenta y las claves para optimizar el presupuesto

Una renovación impacta en la estética y funcionalidad del hogar. Cómo la elección de materiales y el costo de la mano de obra afectan los proyectos de remodelación de esos ambientes

>Renovar el baño y la cocina de una vivienda otorgan un impacto estético como funcional al hogar. La refacción favorece en incrementar significativamente el valor de la propiedad pero los costos se incrementaron con fuerza al compararlos interanualmente en pesos.

Actualmente, según María del Mar Danuzzo, encargada de Arquitectura Comercial de Familia Bercomat, los costos pueden variar ampliamente: “Los precios de remodelación para baños oscilan entre USD 2.000 y USD 10.000, dependiendo de factores como el tamaño y las terminaciones deseadas”.

En cuanto a las cocinas, los costos pueden escalar hasta los USD 20.000, representando todo un desafío para quienes buscan renovarlas incorporando lo último en diseño, mobiliario, grifería y artefactos.

Un baño estándar, sin contemplar la mano de obra, puede llegar a costar aproximadamente $800.000, si se consideran elementos básicos como sanitarios, bañera y cerámicas.

Este presupuesto para la remodelación del baño incluye el combo completo de sanitarios (inodoro con tapa, bidet, lavatorio con columna), grifería, bañera y espejo). Además, hay que sumar el costo de la cerámica, el pegamento y la pastina, cuyo valor varía según el tamaño del baño y si se decide revestir solo el piso o también las paredes.

Tomando como ejemplo un baño de 2 x 2,5 metros, se necesitarían cubrir aproximadamente 10 metros cuadrados entre piso y paredes. El costo adicional por estos materiales sería de $45.000, calculando $4.500 por m2 para los cerámicos incluyendo pastina y pegamento.

En agosto de 2024, un oficial albañil especializado percibe $35.730 por jornada laboral de 9 horas, de acuerdo con el convenio de la Unión Obrera de la Construcción (UOCRA). Sumando $29.061 de un medio oficial o $26.028 de un ayudante, los costos de mano de obra diarios oscilarán entre $60.000 y 90.000 pesos.

La UOCRA y las cámaras del sector actualizaron las escalas salariales en junio de 2024, y estos montos se mantendrán al menos hasta septiembre.

A pesar de los costos, la ventaja de renovar el baño y la cocina es indiscutible. Mejorar la funcionalidad, actualizar el diseño interior y aumentar el valor de la propiedad hasta un 20% son algunos beneficios.

“Anticipar la compra de griferías, sanitarios y mobiliario puede ser una buena estrategia para esquivar incrementos de precios derivados de la inflación. Asimismo, elegir materiales con una buena relación costo-beneficio y considerar realizar algunas tareas uno mismo son métodos eficaces”, agregó Danuzzo.

Se recomienda solicitar múltiples cotizaciones antes de comenzar un proyecto y aprovechar descuentos y promociones en fechas especiales como el Hot Sale.

Es crucial considerar gastos adicionales como impuestos, permisos municipales y costos de importación de ciertos materiales. La variabilidad regional en la mano de obra también puede influir en el presupuesto total.

Para aquellos que no cuentan con el dinero al momento de iniciar la obra, hay planes de financiación a baja tasa. En algunos negocios del rubro se permite pagar en 18 cuotas fijas. Con solo presentar DNI, los mayores de 18 años pueden acceder hasta $200.000 en efectivo o hasta $1.000.000 en materiales de construcción, sin necesidad de recibos de sueldo ni facturas de servicios.

Lucángeli señaló: “En la cocina, es clave definir el proyecto, especialmente el diseño del mueble, que es el rubro con mayor demora en la entrega.

“Las islas o penínsulas son útiles para mejorar la circulación en este ambiente cada vez más valorado. Aunque predomina el blanco, actualmente se utilizan colores cálidos y audaces, con nuevas tonalidades, materiales y tecnologías que permiten personalizar el espacio”, añadió Lucángeli.

“En espacios reducidos, es crucial optimizar los recursos. Primero se abordan los servicios básicos, luego el almacenamiento y, finalmente, la iluminación. En viviendas más amplias, es frecuente encontrar baños con doble bacha, grifería de alta calidad y, a veces, muebles y sanitarios suspendidos que realzan la estética y funcionalidad,” concluyó Lucángeli.

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