16 de septiembre de 2024
La inmunoterapia logró una supervivencia imposible hasta ahora en pacientes con malanoma avanzado
Un estudio publicado en New England Journal of Medicine reveló que casi la mitad de los pacientes con ese tumor tratados con este tipo de terapia biológica sobrevivieron sin cáncer por más de 10 años. Cuál es la ventaja respecto a los tratamientos tradicionales
Según El ensayo clínico siguió a los participantes durante una década y demostró que el tratamiento con una combinación de nivolumab e ipilimumab ofrece una supervivencia prolongada en comparación con otros tratamientos.
Estos datos sugieren que, tras diez años, casi la mitad de los pacientes tratados con esta combinación siguen vivos sin signos de cáncer.El ensayo clínico, denominado CheckMate 067, incluyó a 945 pacientes con melanoma avanzado que no habían recibido tratamiento previo. Estos pacientes fueron divididos en tres grupos de forma aleatoria para comparar la efectividad de tres regímenes de tratamiento distintos. El primer grupo recibió nivolumab en combinación con ipilimumab, administrados cada tres semanas durante cuatro dosis, seguido de nivolumab cada dos semanas. El segundo grupo fue tratado con nivolumab en monoterapia, mientras que el tercero recibió ipilimumab en monoterapia, con un placebo añadido en ambos casos. Los pacientes continuaron el tratamiento hasta que se detectó progresión de la enfermedad, surgieron efectos secundarios intolerables o decidieron abandonar el ensayo.Los resultados a largo plazo del ensayo son impresionantes. La supervivencia global media de los pacientes tratados con nivolumab más ipilimumab fue de 71,9 meses, lo que representa una mejora notable en comparación con los 36,9 meses para aquellos tratados con nivolumab en monoterapia y los 19,9 meses en el grupo que recibió únicamente ipilimumab.
Estos datos destacan la superioridad de la combinación de inmunoterapias para prolongar la vida de los pacientes con melanoma avanzado.
Un dato clave es la durabilidad de la respuesta en los pacientes que lograron estar libres de progresión a los tres años. El 96% de aquellos tratados con la combinación de nivolumab e ipilimumab sobrevivió diez años sin que la enfermedad regresara. Esto demuestra el impacto a largo plazo de la inmunoterapia en la mejora del pronóstico de pacientes con melanoma metastásico, una enfermedad que hace apenas una década tenía una expectativa de vida de solo seis meses. Los resultados respaldan la eficacia sostenida de los inhibidores de puntos de control inmunitario y confirman que muchos pacientes pueden alcanzar una vida prolongada sin la amenaza constante de la progresión del melanoma.La inmunoterapia con inhibidores de puntos de control inmunitario, como nivolumab e ipilimumab, actúa liberando los “frenos” que el cáncer impone sobre el sistema inmunitario. En condiciones normales, las proteínas PD-1 y CTLA-4 limitan la respuesta del sistema inmunitario para evitar daños colaterales en tejidos sanos.El uso de inmunoterapias ha demostrado ser altamente efectivo, sobre todo en tumores con una alta carga mutacional, como el melanoma. Los tratamientos con nivolumab e ipilimumab se han convertido en una opción estándar para pacientes con melanoma metastásico y se están investigando para otros tipos de cáncer.
El éxito de la inmunoterapia en el tratamiento del melanoma metastásico ha impulsado su uso en otros tipos de cáncer, con resultados igualmente prometedores. En el cáncer de pulmón con invasión muscular y en el cáncer de mama triple negativo, los estudios han demostrado que la combinación de inmunoterapia con otros tratamientos, como la quimioterapia, puede aumentar significativamente la supervivencia global de los pacientes.
En el caso del cáncer de mama, una investigación presentada en el Congreso de la Sociedad Europea de Oncología Médica (ESMO, por sus siglas en inglés) mostró que las pacientes tratadas con inmunoterapia y quimioterapia antes de la cirugía tenían una tasa de supervivencia a cinco años del 86,6%, en comparación con el 81,2% en aquellas que recibieron un tratamiento estándar con placebo.A pesar de los grandes avances, la inmunoterapia no es eficaz en todos los pacientes. Actualmente, entre un 25% y un 30% de los enfermos tratados con inhibidores de puntos de control inmunitario responden positivamente al tratamiento. Esto plantea uno de los mayores desafíos para la investigación en este campo: entender mejor por qué la inmunoterapia falla en ciertos casos.
Factores como la carga mutacional del tumor, el microambiente tumoral o la exposición a tratamientos previos parecen influir en la efectividad de la inmunoterapia. Los expertos continúan explorando estos factores para optimizar las terapias existentes y desarrollar nuevas estrategias que puedan beneficiar a una mayor proporción de pacientes.Estos desafíos resaltan la complejidad de la inmunoterapia, que sigue siendo un campo en constante evolución con un gran potencial por desarrollar.