6 de septiembre de 2024
Lo que no se vio del triunfo de Argentina: los dardos a Chile, el pedido al Dibu Martínez y el ranking de los más mimados sin Messi ni Di María
La Albiceleste goleó a la Roja por 3-0 y se mantiene firme en lo más alto de las Eliminatorias Sudamericanas
En su ingreso a la cancha, junto a sus dos hijas y su esposa, desde los cuatro costados del estadio se bajó un estruendoso “Fideo, Fideo”, acompañado por un “Dale campeón, dale campeón”. El cantante Abel Pintos también le aportó su toque al dedicarle la canción “No me olvides”, lo que dio el pie para que ingrese todo el plantel nacional con una remera especial, con el logo en la espalda del clásico festejo del corazón que hace el actual hombre del Benfica tras cada gol. Chiqui Tapia, titular de la AFA, le dio una plaqueta, mientras que Alejandro Domínguez, presidente de la Conmebol, le obsequió una réplica de la Copa América.
“Ahora voy a estar en la tribuna alentándolos; y seguro seguirán en el mismo camino, porque tienen muchos huevos para seguir así”, soltó el rosarino con la voz entrecortada.Los arqueros de la Roja aprovecharon la distracción del público para hacer los movimientos precompetitivos en uno de los arcos y evitar la silbatina generalizada. El primero en hacer la entrada en calor en La Scaloneta fue el Dibu Martínez, quien recibió un inesperado pedido del público. “Que baile el Dibu, la p…”. El portero, con una sonrisa en el rostro, accedió sin problemas y emuló los pasos que suele hacer tras contener un penal.A la hora de los himnos, el chileno fue silbado al principio por los presentes y luego acallado por algunos cánticos, especialmente uno que rememora la delicada situación que atraviesan los de Gareca en la tabla de posiciones.
La apertura del marcador entonó a los hinchas, que además de arremeter nuevamente contra la visita también se animaron a hacer bajar desde las tribunas el “ole, ole” que estuvo cerca de coronarse con un verdadero golazo tras una gran cantidad de toques entre todos los jugadores de La Scaloneta. Aunque parecía que a la campeona del mundo le faltaba precisión en los últimos metros, apareció la Araña para ejecutar un verdadero bombazo que rompió el arco defendido por Gabriel Arias.
El segundo tanto encendió nuevamente al Monumental con cánticos como “es para vos, es para vos...” y “un minuto de silencio, para Chile que está muerto”. Dybala también se llevó un lindo recuerdo. Además de lucir la mítica 10 de la Selección, unos pocos minutos le bastaron para demostrar sus pinceladas de talento, decretar el 3-0 y ganarse la ovación de la hinchada.Con la victoria consumada, llegó la hora de los festejos y celebrar la obtención del bicampeonato de América en su primer partido como local tras la coronación en Miami. De Paul fue el abanderado de la fiesta, al tomar el micrófono y levantar a la gente con gritos como “el bicampeón”, “nos volvimos a ilusionar” o “a mí me volvió loco esta Selección”. Luego, durante la vuelta olímpica, la batuta la tomó Lautaro Martínez. El Toro también aprovechó la ocasión para elogiar a Di María bajo el lema “Muchas gracias Fideo, lo que hiciste por Argentina no se olvida en la vida”. El Dibu, por su parte, no dejó pasar la oportunidad para recrear su baile y celebrar con su icónico estilo con la copa.