27 de agosto de 2024
Vuelve con fuerza la apuesta por inversiones en pesos para aprovechar el dólar planchado
Algunos instrumentos en moneda local, como las Lecap o los bonos CER, tuvieron un importante salto de la demanda. El mercado le cree a “Toto” Caputo que será capaz de mantener la paz cambiaria al menos por un tiempo
El resultado no solo es el control de la cantidad de pesos que circulan, sino especialmente la tranquilidad de los distintos tipos de cambio. Tanto el dólar MEP como el contado con liquidación tuvieron leves fluctuaciones a lo largo del mes y se mantienen con cierta comodidad por debajo de los $1.300. El dólar libre se mantiene prácticamente planchado en la zona de 1.350 pesos.
Todo indica, además, que el Central está en condiciones de mantener esta estabilidad. Incluso muchos piensan que en septiembre los distintos dólares financieros podrían tener una caída adicional. El hecho de haber conseguido en agosto un saldo comprador en su intervención cambiaria (cerca de USD 550 millones hasta ahora) también sustenta esa tesis.Por un lado se espera un significativo ingreso de divisas por el blanqueo, pero además están aquellos que quieren sumarse al Régimen Especial de Bienes Personales (REIBP), que permite pagar cinco años consecutivos a una alícuota del 0,45% anual. Esto implicaría que muchos salgan a vender dólares para poder cumplir con este pago en pesos.Para las más cortas, con vencimiento en septiembre, el rendimiento llega al 44% anual. Se trata de una tasa todavía algo negativa en relación a la inflación, pero que es suficiente como para dar un interesante rendimiento en moneda dura, que al final del día es el parámetro que miran muchos inversores.
No es la única alternativa. También creció el interés por los bonos CER, es decir que ajustan de acuerdo al índice de inflación minorista. El último índice divulgado por el Indec, que arrojó 4% en julio, desató más demanda por estos instrumentos porque el dato terminó siendo algo mayor al esperado. Y la perspectiva es que será difícil que agosto perfore ese nivel.Otras opciones todavía más conservadoras son los plazos fijos que ofrecen los bancos o las cuentas remuneradas de las fintech. A pesar de cierto incremento en las últimas semanas, ningún banco paga arriba del 38% ó 39% anual. Y muchos de primera línea siguen abajo del 35%. En el caso de las fintech, la mayoría también paga debajo del 40%, con algunas pocas excepciones.
Es difícil leer este comportamiento de los inversores como una demanda genuina por instrumentos en pesos, sino que todo sigue supeditado a la posibilidad del Gobierno de mantener la tranquilidad cambiaria. Incluso la posibilidad que los dólares financieros caigan otro escalón adicional en septiembre.