4 de agosto de 2024
Simone Biles: cómo la estrella de los Juegos Olímpicos superó el bloqueo mental y volvió a confiar en sí misma
La deportista norteamericana se había retirado de la final de Tokio 2020 por los “twisties”, uno de los problemas psicológicos que pueden afectar la salud y la seguridad física de las gimnastas. Cómo trabajó su terapeuta en la recuperación y cuáles son las claves de su resiliencia, según los expertos
En aquella oportunidad, Simone sufrió ¿Por qué una gimnasta de elite puede perder la confianza de un momento a otro, sufrir un bloqueo mental y abandonar en la final? El doctor José Eduardo Abadi, médico psiquiatra, psicoanalista y escritor describió a Infobae el cuadro que sufrió la gimnasta en las olimpíadas de Tokio:
“Biles tuvo un cuadro panicoso y de ansiedad, que muchas veces generan una fobia importantísima, y el resultado es una retracción y una inhibición importante a salir y exponerse. Esto, como todo cuadro de angustia, genera una inhabilitación para poder llevar adelante el proyecto que tenía”.La gimnasta había dicho en aquella oportunidad: “Creo que fue solo el factor de estrés. Se acumuló con el tiempo, y mi cuerpo y mi mente simplemente dijeron que no. Pero ni siquiera yo sabía que estaba pasando por eso hasta que simplemente sucedió”.
Acerca de esta situación, el doctor Jorge Rocco, médico psiquiatra especializado en deportes, explicó a Infobae que cualquiera puede ser el detonante que lleve a una situación de estrés y a tener un síntoma:Y añadió: “En el caso de Simone Biles hay que tener en cuenta algunas cosas de su historia, que fue abusada y maltratada. Esto quiere decir que no hubo gente que la apoyara y cuidara. Paradójicamente, cuando hacía los saltos, donde no hay apoyos, donde no hay donde sostenerse, aparece el síntoma”.
Luego de que se bajara de la competencia, Biles expresó: “Después de la actuación que hice, no quería seguir. Tengo que centrarme en mi salud mental. Creo que está más presente en el deporte ahora mismo. Tenemos que proteger nuestra mente y nuestro cuerpo y no limitarnos a hacer lo que el mundo quiere que hagamos”.Robert Andrews, terapeuta de Simone Biles, fundador y director del Instituto de Rendimiento Deportivo de Houston, llamó al padecimiento de Biles como “estrés de diátesis”, en una entrevista publicada en Relevo. “Significa que la balanza se desequilibra si empiezas a añadir estrés. Con el tiempo, la balanza se inclina y el cerebro da un vuelco. Ahí es cuando suceden los bloqueos mentales. En Tokio, ese estrés empujó a Simone, alcanzó un nivel crítico y su cerebro dijo que no podía hacerlo (...) Cuando llegas al momento en el que hay demasiada tensión en la balanza, ésta se inclina y el cerebro ya no te dejará hacer nada de lo que podías hacer”, señaló el psicólogo de Biles.El documental “Simone Biles vuelve a volar”, recientemente estrenado en Netflix, ofrece una mirada profunda a las dificultades y éxitos de la estrella de la gimnasia artística desde los Juegos de Tokio 2020 hasta su retorno a la competencia.El filme cuenta que la gimnasta nació en Ohio, Estados Unidos, y durante su infancia la Justicia determinó que ella y su hermana Adria fueran criadas por sus abuelos (su madre y padre tenían problemas con las drogas y el alcohol). Por otro lado, sus hermanos varones quedaron en manos de otra parte de la familia.En ese momento Biles afirmó: “La mayoría me conoce como una chica feliz, risueña y enérgica, pero me siento rota y cuanto más trato de apagar esa voz en mi cabeza, más alto me grita. Ya no tengo miedo de contar mi historia. Yo también soy una de las sobrevivientes que sufrió abusos sexuales por parte de Larry Nassar”.
En la gimnasia artística hay muchos términos relacionados con el miedo: los twisties, el bloqueo mental, el abandono, el balking. Se trata de una actividad físicamente exigente y con una alta tasa de lesiones, pero también muy difícil a nivel mental.El Según el doctor Abadi, para trabajar desde el punto de vista psicológico estos problemas hay que tratar de que la persona le ponga palabras a esa ansiedad y darle contención y apoyo: “Es importantísimo en los cuadros de ansiedad poder mostrar cómo estos se deben a un factor que tiene que ver con el imaginario, pero que ese imaginario, naturalmente, influye no solo en lo que se piensa, sino también en el cuerpo, en cómo la persona se mueve y en lo que hace”.
Para las nuevas olimpíadas, además del apoyo de sus entrenadores, Lauren y Cecile Landi, de su familia y, en particular, de su esposo Jonathan Owens, jugador de fútbol americano, Biles ha contado con su terapeuta Robert Andrews, un experto clave en su vida deportiva que la ayudó a superarse.
En una entrevista publicada en Relevo, el psicólogo expresó: “Simone Biles es un gran ejemplo. Se retiró y no sólo tomó esa decisión por su salud mental, también por su salud física. Si hubiera hecho esos saltos, podría haberse lesionado porque su cerebro no sabía dónde estaba en el espacio. Así que lo que hizo fue defenderse mental, física y emocionalmente. Su ejemplo ha dado permiso a muchos atletas para pedir ayuda. Desde la pandemia, cada vez vemos más desean los servicios de salud mental y ella, de alguna manera, ayudó a abrir esa puerta”.“Si ella pone una gran sonrisa, los jueces sonríen y los entrenadores de sus rivales se detienen a mirarla. En un análisis psicológico, eso la hace especial”, dijo el psicólogo.
Y añadió el experto: “Simone realmente no creía en sí misma. “En eso nos pusimos a trabajar, en ayudarla a desarrollar su confianza. El objetivo era analizar su mentalidad, cómo ella manejaba las emociones y recordar los momentos en los que ella había sido reactiva. Introdujimos el concepto de ‘quitar el pie del acelerador’ o, lo que es lo mismo, no usar tanta energía.
Finalmente, Andrews destacó: “Por su fuerza interior, el coraje para superar la adversidad, ella es un modelo a seguir para muchas jóvenes de todo el mundo y ahora está de regreso de nuevo”.
Y esa resiliencia está grabada para toda la vida en el brazo tatuado de esta superatleta con palabras de una poesía de Maya Angelou: “And still I rise”. En español, “Y aún así me levanto”, nos asegura Simone, en el deporte y en la vida.