22 de junio de 2023
Falleció el chofer de Neruda, un testigo clave en la investigación de la muerte del poeta

Manuel Araya, el principal denunciante de que el Premio Nobel de Literatura fuera asesinado por la dictadura chilena de Augusto Pinochet, murió a los 77 años tras estar varios días internado en un hospital por un accidente cardiovascular.
El chofer y secretario de Pablo Neruda, Manuel Araya, quien además fue el principal denunciante de que el Premio Nobel de Literatura fuera asesinado por la dictadura chilena, falleció el martes último a los 77 años, tras estar varios días internado en un hospital por un accidente cardiovascular, se informó este miércoles.
La denuncia de Araya llevó a reabrir el caso y una serie de investigaciones para dar con las razones de la muerte del destacado poeta chileno.
Araya llevaba varios días internado en el Hospital Claudio Vicuña, región de Valparaíso (a 114 kilómetros de Santiago), luego de sufrir un accidente cardiovascular el pasado 12 de junio y por el que finalmente falleció.
El secretario denunció en 2011 que Neruda fue asesinado el 23 de septiembre de 1973 mediante una inyección letal, lo que derivó en una serie de investigaciones respecto de la real causa de la muerte del Premio Nobel de Literatura.
"Yo hice esta denuncia desde un principio, pero en Chile no tuve casi nunca cobertura (…) Ahora esperamos que la señora ministra Plaza resuelva. Soy la persona más feliz hasta el momento, porque llegamos a esta parte, Neruda fue asesinado por esta inyección", expresó Araya a raíz de la investigación realizada por el último panel de expertos.
El Partido Comunista (PC) de Chile, expresó "su pesar" por el fallecimiento de Manuel Araya a través de un comunicado donde destacó que "fue clave su testimonio, su gestión y su valentía para que existieran los elementos que dieron pie a la querella por la muerte del poeta que presentó el Partido".
"Manual Araya estuvo siempre a disposición de esa investigación judicial y bregó con todas sus fuerzas para que no solo el legado de nuestro Premio Nobel perdurara sino que también se impusiera la verdad sobre su muerte", destacó el PC.
La muerte del Premio Nobel de Literatura 1971 y dirigente comunista lleva años en investigación al no existir una razón clara de su fallecimiento, todo bajo la mirada de abogados, familiares y amigos, quienes afirman que fue asesinado bajo la dictadura de Augusto Pinochet (1973-90).
El pasado mes de febrero la coordinadora del panel de expertos internacionales, Gloria Ramírez, hizo entrega del análisis a la jueza chilena Paola Plaza, que no divulgó los resultados debido a que "la causa está en sumario", indicó a la prensa, y argumentó que además primero tenía que leerlos ella.
"La causa está en sumario, en estos momentos las partes tienen acceso y, por lo tanto, cualquiera podría pedir copia de los antecedentes, pero pronunciarse el tribunal sobre el contenido (del informe) es improcedente", añadió.
Más allá de esta situación, la magistrada aclaró que "una resolución del tribunal no puede basarse en un único y exclusivo elemento de prueba" y agregó que ahora viene "una fase de revisión, estudio, ponderación, valoración, para que el tribunal dicte las resoluciones que en derecho corresponden, según aconseje el curso de la investigación".
Previo a la entrega de los resultados, el sobrino de Neruda, Rodolfo Reyes, adelantó el resultado de la investigación y aseguró que el Nobel de Literatura fue asesinado.
"La muerte del Premio Nobel de Literatura 1971 y dirigente comunista lleva años en investigación al no existir una razón clara de su fallecimiento, todo bajo la mirada de abogados, familiares y amigos, quienes afirman que fue asesinado bajo la dictadura de Augusto Pinochet (1973-90)".
"Después de 50 años, puedo decir fehacientemente que a Neruda lo mataron agentes del Estado. Los informes así lo demuestran", expresó Reyes en una entrevista radial.
El abogado y sobrino de Pablo Neruda, seudónimo de Ricardo Eliécer Neftalí Reyes Basoalto, explicó que la familia del escritor esperaba desde 2017 que el laboratorio descartara por completo que los restos óseos del poeta hubiesen sido contaminadas por tierra o algún otro elemento.
De esta forma, Reyes dijo que el análisis de los restos demostró que la bacteria Clostridium botulinum se encontraba en el cuerpo del poeta de manera endógena, es decir, "fue a través de su torrente sanguíneo que llegó a sus osamentas".
Señaló que desde la familia nunca creyeron la versión oficial, según la cual el poeta murió a causa del cáncer de próstata.
"Tenía cáncer, pero no fue el cáncer lo que lo mató, fue el Clostridium botulinum, un arma biológica que ya se usaba en la Guerra de Corea y está comprobado", afirmó Reyes.