4 de febrero de 2025
El blooper del guardaespaldas de Messi con un fanático que invadió el campo de juego para saludar al argentino

Leo fue clave en el triunfo 3-1 del Inter Miami en el amistoso ante Sporting San Miguelito en Panamá, pero las miradas se las llevó el hombre encargado de garantizar su seguridad
Uno de esos intentos terminó con un intercambio inesperado entre un aficionado y el guardaespaldas del astro rosarino.
Durante el partido en Panamá, Chueko tuvo una actuación que mezcló profesionalismo, un error inesperado y, según las imágenes registradas, un toque de humor.
Tras reincorpores, Chueko se acercó e intentó separarlo. Al mismo tiempo las cámaras mostraron el momento en que el guardaespaldas esbozó una leve sonrisa, mostrando que asimiló el acontecimiento con humor y sabiendo que estaba en la mira de todo el público presente.
“Matarte entrenando a nivel elite y que una resbalada te cague el laburo”, bromeó un usuario. “El guardaespaldas de Messi debería tener un calzado óptimo para el pasto, pierde tracción y equilibrio”, consideró otro, mientras que un tercero añadió: “Fue el único que pudo derribar al guardaespalda de Messi. Todo hizo bien el tipo. Lo derribó al guardaespalda y luego abrazo a Messi”.El episodio entre Chueko y el fanático llamó la atención precisamente porque se ha vuelto un fenómeno habitual en los escenarios donde Messi juega. Según las imágenes difundidas en redes sociales, el hincha que provocó el accidente solo quería estar cerca de La Pulga, un gesto que a primera vista pareció inofensivo pero que evidenció los retos de garantizar la seguridad de una figura mediática de su calibre.
Pese a estar físicamente preparado para su labor, desafortunadamente el incidente en Panamá dejó al descubierto que ni siquiera el más preparado puede evitar imprevistos.